Grupo de fiscalizadores exige al gobernador Wilmer Dios Benites que priorice reparación de unidades móviles para ayudar a pacientes.
Grupo de fiscalizadores exige al gobernador Wilmer Dios Benites que priorice reparación de unidades móviles para ayudar a pacientes.

Como un “cementerio de ambulancias” calificaron los consejeros George Díaz, Daniel Sanjinez, Antonio Espinoza y Rudy Fiestas los ambientes del Hospital Regional de Tumbes (HRT), en el asentamiento humano Ciudadela Noé, donde estos vehículos permanecen juntando polvo.

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Los consejeros contabilizaron un total de 9 ambulancias inoperativas, las cuales son utilizadas en la actualidad como un almacén de llantas entre otros objetos, tal como lo comprobaron en la visita inopinada que realizaron ayer en el nosocomio.

Antonio Espinoza y George Díaz mencionaron que cuatro unidades móviles fueron adquiridas cuando Ricardo Flores era gobernador.

Aunque cabe mencionar que, según el informe del Órgano de Control Institucional (OCI) de la dirección de Salud, 014-2020-OCI/0827-SOO, emitido en setiembre del 2020, hay algunos vehículos que fueron adquiridos hace 28 años, aproximadamente.

Críticas

Los fiscalizadores cuestionaron al gobernador regional Wilmer Dios Benites por no haber priorizado la reparación de estas unidades móviles.

El consejero Daniel Sanjinez comentó que el Hospital Regional de Tumbes tiene actualmente solo dos ambulancias disponibles para atender cualquier emergencia, por lo que es necesario que haya voluntad política por parte de la autoridad competente para ayudar a los pacientes en medio de la crisis sanitaria por la pandemia del coronavirus.

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Es preciso indicar que algunas unidades no solo pertenecieron al Hospital Regional de Tumbes sino a centros de salud de distritos alejados a la capital de región, como Papayal y San Jacinto, zonas en donde son indispensables estos vehículos.

“Las ambulancias pudieron haber sido repotenciadas para luchar contra la COVID-19, pero, al parecer, a nuestro gobernador no le interesa”, expresó por su parte Rudy Fiestas.

Los vehículos son administrados por la Dirección Regional de Salud (Diresa), cuyo director, Harold Burgos Herrera, también ha sido cuestionado por este grupo de consejeros, quienes, en más de una ocasión, solicitaron su despido.

En la próxima sesión de consejo se abordará este tema y se invitará al gobernador y a los encargados del sector Salud para que respondan sobre esta situación.