Valentina Montoya no es una niña como cualquier otra, a sus cortos 13 años no sólo se dedica a sus actividades escolares, sino que tiene una microempresa de deliciosos postres y tortas caseros. La niña tenía tan sólo 9 años cuando comenzó a enamorarse de la repostería. Como muchos niños y adultos, la pandemia hizo que ingrese a la cocina, y su pasión por los postres solo creció con el tiempo, demostrando a sus padres que podía hacerse cargo de su empresa y sus actividades escolares sin descuidar ninguna.
Fue durante los meses de encierro, que la pequeña comenzó a llevar distintos cursos online de repostería, mejorando cada vez más su técnica y su sazón. Llevó cerca de 60 cursos virtuales, que la hicieron aprender cada vez más y así poder ver su sueño hacerse realidad. Después de un par de años, y con la ayuda y apoyo incondicional de sus padres, Carolina Henríquez y César Montoya, Valentina se animó a abrir su propio negocio que hoy es un éxito.
Cada año en el negocio han hecho que la pequeña vaya perfeccionando sus técnicas de decoración en repostería y hoy logra hacer tortas impresionantes con mayor dificultad en la decoración, llevándola a lanzar su propio libro de recetas llamado ¨Las recetas mágicas de Valentina¨. ¨La idea de esta publicación es compartir con más niños y niñas la dulzura de los postres¨. El libro cuenta con recetas fáciles y rápidas de postres en taza que son una delicia, los rellenos favoritos de Valentina para tortas, una sección de galletas maravillosa, entre otros.
