“A primera impresión la podemos llamar pizzería de comida confortable, pero también encontramos platos inspirados en la cocina del sur de Italia de esos que abren el apetito y alegran el corazón”, comenta Jimena Agois, fotógrafa y periodista gastronómica
“A primera impresión la podemos llamar pizzería de comida confortable, pero también encontramos platos inspirados en la cocina del sur de Italia de esos que abren el apetito y alegran el corazón”, comenta Jimena Agois, fotógrafa y periodista gastronómica

La pandemia y el cierre de muchos locales por un tiempo indefinido al comienzo del año 2020 hicieron que en el rubro de restaurantes se buscarán formas creativas y también alternativas de salir adelante. Es así que al grupo propietario de Troppo se le ocurre crear una marca alternativa que les permita vender un producto adecuado para el delivery sin afectar la marca del restaurante. Y para ello, qué mejor que sus deliciosas pizzas. Luego de poco tiempo, y debido a la gran aceptación, Rossa abrió un espacio propio para atender al público in situ ubicado en pleno corazón de San Isidro.

José Luis Saume, de quien ya hemos hablado antes por su paralelo trabajo en Lila (regenta ambos locales), es quien está al frente de la cocina de Rossa, un espacio que a primera impresión podemos llamar pizzería de comida confortable, pero donde también encontramos platos inspirados en la cocina del sur de Italia, de esos que llaman la atención y abren el apetito, pero sobre todo que alegran el corazón. La masa de pizza es el hilo conductor que nos lleva por la carta, corta y concisa de Rossa. Podemos encontrarla frita en forma de donuts bañados en stracciatella, pomodoro y albahaca; o en versión cacio e pepe con pecorino romano y pimienta negra.

Hay también pan al ajo, que se puede pedir también con anchoas o piadinas. También encontramos para comenzar unas alitas con salsa marinara agridulce y migas crocantes; o unas deliciosas berenjenas alla parmigiana.

Resaltan las ensaladas, en especial la de mozzarella in carrozza y tomates.

SABORES

Hay 10 pizzas enumeradas, pruebe la #6 con grana padano, hongos rostizados, cebollas caramelizadas, nueces y hierbas. La #12 tiene pecorino romano, tocino, cebollas caramelizadas, pimienta y tomillo; la #22 es la versión carbonara hecha pizza. Con pecorino, tocino de cachete ahumado y pimienta, buenísima. Cuentan con una masa sin gluten a base de cassava (yuca) que está muy buena pero sólo puede pedirse en el local. Y cada cierto tiempo lanzan colaboraciones temporales con personajes amigos de la casa. Han participado hasta el momento Marco Tecchia de La Gastrónoma, Luis Martín Alzamora (@Papeaperu), Jerónimo de Aliaga del restaurante Pansalaire, entre otros. Estén atentos a sus redes para que no se pierdan ninguna.

Los platos de fondo son cosa seria. Se pueden encontrar opciones como unos confortables spaghetti al pesto.

Una contundente milanesa de pollo con lechugas salteadas, radicchio, balsámico y salsa mariana. Un baguette servido como pizza enrollada, mozzarella fior di latte, crema de pecorino romano, tomates asados, rúcula, prosciutto y salsa rosa al marsala; el ravioli, que es una de sus pizzas hecha pasta. Es edición limitada y constante rotación.

Se debe preguntar por la especial del día. Deje espacio para el postre. Hay tres opciones, el tiramisú bomb, sticks de pizza con mousse de chocolate, y los struffoli de frutos rojos, mi favorito, unas bolitas de masa frita, que se mezclan con arándanos, frutos rojos y se sirve con una deliciosa bola de helado de vainilla.

Deliciosas propuestas que llevan intensos sabores italianos.