Colchón con manchas de orina: los trucos más usados para dejarlo como nuevo

Aunque este problema es más frecuente en las camas de los bebés, niños o cuando se tiene mascotas, los adultos o ancianos tampoco están libres de esos accidentes que terminan por dañar el colchón. Si el tuyo está con manchas de orina y no quieres recurrir a productos químicos para limpiarlo, aquí te compartimos los trucos caseros más efectivos para dejarlo como nuevo.

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Antes de mencionar los remedios que se pueden aplicar, es importante tener en cuenta que adicional a las sábanas y edredón, es vital tener un protector o cubre colchón para evitar que la mancha llegue hasta él; sin embargo, si aún teniéndolo logró traspasar, hay que actuar cuando la zona aún esté húmeda. Desde ‘La Vanguardia’ aconsejan poner papel absorbente para retirar la mayor cantidad de orina posible.

Trucos caseros para limpiar un colchón manchado de orina

1. Bicarbonato de sodio

• Llenar una taza con bicarbonato de sodio y añadir un poco de agua.
• Esparcir la mezcla sobre la mancha de orina y cubrir el colchón con un plástico grande.
• Dejar actuar entre 6 y 8 horas.
• Luego retirar el plástico y pasar la aspiradora para retirar el bicarbonato.

2. Vinagre

• En una botella con atomizador mezclar 1 parte de vinagre blanco con 1 parte de agua.
• También puedes elegir echar solo vinagre blanco sobre la mancha del colchón.
• Este producto neutralizará los olores y ayudará a quitar la mancha.
• Una vez echado el producto hay que dejarlo actuar por 5 minutos.
• Usa un paño limpio para absorber el exceso de humedad dando toques leves.

3. Agua oxigenada

Este truco casero es ideal en caso la mancha de orina ya esté seca.

• Echar en un recipiente 240 ml de agua oxigenada al 3%, tres cucharadas de bicarbonato de sodio y unas gotas de lavavajillas líquido.
• Mezclar todo con la ayuda de una cuchara.
• Humedecer un trapo o paño blanco en la preparación y aplicarlo sobre la mancha dando toques leves.
• Dejar secar.

¿Cómo elegir un buen colchón?

1. Si es posible, intente sentir la densidad de la espuma. Elegir un colchón más blando o más rígido es subjetivo. Lo que agrada a unos puede no agradar a otros.
2. Observe la tela que cubre la espuma para ver si brinda comodidad térmica.
3. Cambie la posición del colchón de vez en cuando para equilibrar el peso sobre la espuma, evitando marcas permanentes y asegurando la calidad por más tiempo.
4. Buscar productos con certificado de calidad, ya que esto asegura que fueron producidos con materiales adecuados.
5. La vida media de un colchón es de 10 años. Se recomienda cambiar después de este período para evitar problemas respiratorios y alérgicos, ya que los colchones tienden a acumular ácaros con el tiempo.

“Un colchón viejo o de mala calidad puede causar innumerables problemas físicos e incomodidad a la hora de acostarse, lo que repercute en el descanso mental, el estado de ánimo y la productividad diurna de las personas”, explica Silvia Meza, Coordinadora de Ventas de Químicos Especiales de BASF Peruana.