Ya sea en las mayólicas o piso de la cocina o en el suelo del garaje, pero es muy habitual toparnos con manchas de grasa o aceite acumulado. Son difíciles o algunas veces imposibles de quitar, lo sabemos, ya que con la limpieza cotidiana se suele quitar parte de esa grasa, pero no toda. Por ello, queremos contarte cómo limpiar el aceite del suelo de manera efectiva.
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De hecho, el resto permanece y, con el paso del tiempo, se forman manchas visibles en el suelo que son bastante difíciles de eliminar. Sin embargo, existen distintos trucos caseros para quitar manchas de aceite de los suelos.
Trucos para quitar manchas de aceite
Existen numerosos productos en el mercado diseñados para tal fin, tanto para quitar manchas de aceite del suelo como para limpiar cualquier otra suciedad grasienta. No obstante, para quien prefiera utilizar métodos más naturales y menos agresivos, os enseñamos algunos trucos caseros sobre cómo quitar el aceite del suelo.
1. Amoniaco
Es uno de los mejores desengrasante. El amoniaco funcionará perfectamente para eliminar la grasa o el aceite de la mayólica de la cocina, pues en esas zonas se suele acumular bastante grasa. Si esta suciedad se acumula, puede llegar a generar manchas visibles que luego no serán fáciles de quitar.
Por eso, te sugerimos usar amoniaco para limpiar el suelo de la cocina, ya que cuenta con un alto poder desengrasante y hará desaparecer las manchas más difíciles. Además, no solo sirve para quitar manchas de aceite, sino también para limpiar manchas de café, de zumos, refrescos e incluso sangre.
2. Bicarbonato de sodio
Otro de los hacks para quitar las manchas de aceite del suelo de la cocina es usar bicarbonato. Disuelve una cucharada de bicarbonato en cinco litros de agua a temperatura ambiente y usa esta mezcla para dejar el suelo impecable. Tras aplicarlo, se seca bastante rápido con buenos resultados.
También puedes espolvorear bicarbonato sobre la mancha, y con ayuda de un trapo frota sobre la mancha. Después, limpia los restos de bicarbonato con un paño húmedo y tendrás un piso limpio.
3. Zumo de limón
Si las manchas son pequeñas, podemos usar el zumo de limón, ya que el ácido que contiene funciona bien para neutralizar la textura del aceite. El final será una superficie bastante reluciente y limpia.
También puedes combinar el limón con sal. Solo hay que echar sal sobre las manchas de grasa para que la absorba y, con la ayuda de un trapo, frota sobre la superficie. Luego, añade un poco de zumo de limón y frota la mancha con un trapo limpio, logrando tener una superficie completamente limpia.