EFE- Miles de ciclistas llegaron el último domingo a Plaza Italia en el centro de Santiago con el fin de manifestarse a favor del cambio constitucional que se decidirá en Chile el próximo 25 de octubre a través de un plebiscito.
Pasado el mediodía, la caravana ocupó toda la rotonda de lo que los manifestantes renombraron como “Plaza de la Dignidad”, en medio de las masivas protestas originadas en octubre del año pasado.
Provistos de banderas con la consigna “Apruebo” y un llamativo féretro que simbolizaba la muerte de la Constitución Política del dictador Augusto Pinochet, los participantes entonaron cantos de protesta contra el Gobierno mientras circulaban alrededor de la plaza.
El flujo de ciclistas se dirigió a este sitio emblemático de la capital chilena desde distintos puntos de la ciudad, entre ellos las comunas de Ñuñoa, San Miguel y Santiago.
Acompañada por un grupo de vehículos, la caravana se manifestó de forma pacífica y la convocatoria tuvo un carácter familiar: entre las personas presentes se encontraban jóvenes, niños y adultos mayores.
La Policía, que tenía ocupado el espacio con carros y unidades a pie, decidió replegarse a zonas aledañas.
Este tipo de manifestaciones no son nuevas. Ya desde el estallido social del año pasado, los amantes de las dos ruedas impulsaron lo que se llamó la “Revolución Ciclista”, un espacio que denuncia la represión y exige además derechos en la vía pública para evitar accidentes.
Todos los domingos hasta el inicio de la pandemia, miles de ciclistas se manifestaron durante 14 semanas seguidas. Una de estas caravanas llegó incluso a la casa del Presidente de la República, Sebastián Piñera, dos semanas después del estallido social.