El último 30 de marzo, un médico de 60 años, identificado como Frank Gabrin, murió en los brazos de su esposo, Arnold Vargas, tras atender a pacientes que dieron positivo al nuevo coronavirus en el Hospital East Orange de Nueva York.
Vargas contó a la cadena estadounidense NBC que el mismo día su pareja amaneció con un dolor fuerte en el pecho y con problemas respiratorios, por lo que decidieron llamar urgente a las autoridades sanitarias.
Lamentablemente la ambulancia no llegó a tiempo y Frank Gabrin perdió la vida en los brazos de Arnold Vargas, quien se mostró muy dolido cuando fue entrevistado por CNN.
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El esposo del médico denunció que su esposo trabajaba sin las condiciones mínimas de seguridad y que en las últimas semanas había estado atendiendo a pacientes infectados con COVID-19.
A Frank Gabrin no le habían hecho la prueba pese a que tenía alta exposición al virus. Sin embargo, tenía los síntomas como tos seca y fiebre.
Según cuenta Arnold Vargas, el médicos sospechaba que podía tener el coronavirus y se mostró aguerrido de vencer a la enfermedad tras superar dos veces el cáncer, pero lamentablemente no fue así.
" Él me dijo: ' Puedo manejar esto. Sobreviví al cáncer y esto es sólo el coronavirus'", dijo el esposo que sufre por la muerte del doctor.