La crisis ambiental que ha alterado los ecosistemas del planeta, elevando en 2°C la temperatura promedio en los últimos años, viene originando graves consecuencias a los diferentes países del mundo.
Por ello, más de 25 mil líderes de 196 países se encuentran reunidos en Glasgow (Escocia) para participar en la 26 edición de la COP, la cumbre ambiental más importante del mundo; un espacio para debatir las posibles soluciones a los problemas ambientales que padece nuestro planeta, como robustecer la agenda 2030 a través de los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) e involucrando a todos los sectores, público y privado, para trabajar unidos en el desarrollo sostenible.
En esa línea, por tercer año consecutivo, el gremio pesquero, de la mano con sus empresas asociadas y con ocasión de la celebración de la COP, presentó su reporte de sostenibilidad bajo los estándares del Global Reporting Initiative (GRI), poniendo en evidencia el trabajo de todo un sector para el cumplimiento de los ODS, desafío que solo es posible cumplir gracias al compromiso de sus actores con acciones y resultados concretos.
Este hecho sin precedentes ha sido reconocido recientemente por la FAO en su reporte “Gestión Adaptativa de la Pesca en Respuesta al Cambio Climático”, donde señala que la pesquería de anchoveta en el Perú destaca por su manejo adaptativo enfocado en la recolección de datos de observación en tiempo real y por afrontar eficientemente los efectos del cambio climático.
El contar con una biomasa estable y saludable es el mejor legado que el sector pesquero puede dejar para las generaciones futuras. Las cifras así lo demuestran y no escatimaremos esfuerzos para lograr que ello perdure en el tiempo, a pesar que existan algunas voces malintencionadas que sin ningún rigor científico quieran señalar lo contrario.