Los principales líderes de opinión en temas educativos coinciden en algunos indicadores que aluden al nivel de modernidad de la propuesta pedagógica de los colegios. Ellas son:
1) Aprendizaje personalizado, que procura adaptar el ritmo y el contenido de la enseñanza a las necesidades individuales de cada estudiante.
2) Integrar el desarrollo de habilidades blandas en la cotidianidad, especialmente la colaboración y la comunicación.
3) Aprendizaje basado en proyectos que fomenta el estudio interdisciplinario en equipo mediante proyectos de la vida real en los que los estudiantes aplican sus conocimientos y habilidades.
4) Flexibilidad curricular para adaptarse a las necesidades cambiantes de los estudiantes y los desarrollos continuos de la innovación educativa, que les permite explorar sus intereses y habilidades.
5) Competencias digitales para adecuarse a la forma de vivir y aprender de estos tiempos. Eso incluye la enseñanza de programación, análisis de datos y el diseño de la experiencia de usuario.
6) Eso de tecnología en el proceso de enseñanza y aprendizaje. Incluye contar con dispositivos tecnológicos modernos, herramientas de aprendizaje en línea y profesores capacitados para utilizar tecnología en sus clases.
7) Educación en línea que permite ofrecer una experiencia educativa híbrida y atemporal.
8) Enfoque en el desarrollo profesional de modo que los estudiantes tengan una visión sobre las demandas laborales del mercado de trabajo presente y futuro.
Así, una educación moderna supone trabajar en comunidad, en un ambiente de aprendizaje adaptativo y colaborativo.