Según el Ministerio de la Producción, la veda es un espacio de tiempo en el que está prohibido capturar alguna especie por determinadas razones como, por ejemplo, la actividad reproductiva, que asegura el desarrollo de los recursos y los ecosistemas marinos.
En ese contexto, en su último reporte, el IMARPE anunció que los indicadores reproductivos del recurso anchoveta del stock norte-centro mostraron el incremento de su actividad desovante en el mes de julio. Por ello, como parte de las medidas de manejo pesquero, la flota industrial no realiza actividades extractivas del recurso anchoveta en dicho período. Sin embargo, dentro de las 5 millas, que es una zona de protección de la flora y fauna existente en ella y donde suele darse el desove de las especies marinas, se continúa pescando anchoveta.
Recordemos que el IMARPE es la institución científica que más ha estudiado el recurso anchoveta en el mundo; por ello, es fundamental seguir sus recomendaciones y fortalecerlo. Si bien el anuncio de la presidenta Boluarte sobre la construcción de una moderna embarcación de investigación científica es importante, consideramos que los derechos de pesca que recauda el Fisco, como parte de la actividad industrial, deberían ser destinados al ente científico para dotarlo de recursos y así ampliar el conocimiento sobre la anchoveta y otras especies marinas.
El buen ejemplo de la pesquería industrial de anchoveta debería replicarse en otras pesquerías para el desarrollo sostenible del sector en nuestro país; ello implica respetar las recomendaciones técnicas y científicas. Si todos respetamos el proceso de desove de la anchoveta, sería una excelente forma de demostrarlo.