:quality(75)/arc-anglerfish-arc2-prod-elcomercio.s3.amazonaws.com/public/KLBKTVQ32BADHK5SRS4NVUF22M.jpg)
Intentan dar una avance en medio de la dificultad. Un grupo de investigadores, alumnos y profesionales de la Universidad Peruana Cayetano Heredia, con el apoyo de la empresa biofarmacéutica Farbed, trabajan juntos en laboratorios, ubicados en Chincha, para desarrollar una vacuna contra el nuevo coronavirus, COVID-19.
“Tenemos los mismos equipos que se están usando en Alemania para producir la vacuna para humanos”, dijo Mirko Sivik, jefe del laboratorio de bioinformática de la mencionada casa universitaria a ‘Al estilo Juliana’.
“En las situaciones más adversas debemos intentar dar un paso grande”, complementa el médico especialista en microbiología Manolo Fernández.
En dichos laboratorios donde se han estudiado otros tipos de coronavirus que afectan a animales, los especialistas ponen todo sus esfuerzos para lograr una vacuna que no permita al COVID-19 adherirse a las células y terminen afectando a la persona.
“Hay que bloquear la manito del virus, esa mano es la que el virus usa para agarrarse de un receptor de la célula humana. Una vez que lo agarra genera un cambio estructural y empieza un proceso, por el cual la célula literalmente se traga al virus y lo interioriza”, explica Fernández.
“Podríamos ver si están funcionando bien los anticuerpos producidos por nuestra proteína, ya que impiden que estos receptores virales se peguen a los AC2”, agrega Sivik.
El grupo de científicos tenían planeado para hoy cruzar información con sus homólogos en Chile para logren un mayor avance en la vacuna contra el coronavirus. Se estima que en 18 meses pueda haber un desarrollo favorable.
