Luego de seis horas de intenso trabajo, los bomberos lograron controlar el incendio en la Av. Jesús 520-B, donde dos locales comerciales fueron consumidos por las llamas. El siniestro inició minutos antes de las 4 horas y afectó a al menos 20 negociantes, quienes lo perdieron todo, mientras que alrededor de 80 personas se quedaron sin empleo. El incendio también dejó 13 heridos, entre los cuales se encontraban familiares de los dueños que intentaban salvar mercancías.
María Elena Flores Carpio, directora ejecutiva de Salud de las Personas de la Gerencia Regional de Salud de Arequipa, informó que las personas heridas presentan quemaduras de segundo grado. Entre los afectados, destaca el caso de Hardy Haro, un bombero de 27 años que fue trasladado a la clínica AUNA tras sufrir una lesión ocular por esquirlas mientras trabajaba en el control del fuego.
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El mayor brigadier Gustavo Carrasco, responsable de la emergencia, indicó que se movilizaron varias compañías de bomberos para sofocar el incendio. Un total de 50 bomberos participaron en la operación, logrando controlar el fuego y comenzar las labores de enfriamiento de la zona afectada.
El bombero herido ya se encuentra estable, según reportaron las autoridades. Mientras tanto, la policía ha iniciado las investigaciones para determinar las causas del incendio, el cual fue combatido utilizando un hidrante cercano para abastecer de agua a las unidades de emergencia.
Diego Ayca, subgerente de Gestión de Riesgos y Desastre de la Municipalidad Provincial de Arequipa, explicó que dos locales de 20 negocios fueron afectados por el incendio.
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El funcionario informó que los locales no contaban con los permisos municipales para operar. Hace solo una semana, la municipalidad de Arequipa realizó una inspección, por lo que tenían 20 días para levantar las observaciones; e incluso se clausuraron algunos locales madereros. “Ellos han indicado que antes de irse apagaban las centrales de energía, en ese sentido la Policía investiga la causa”.
De 80 locales, el 25% cuentan con los permisos y licencias, pero el resto no, refirió Ayca.
Se convocará a una reunión, con varios actores, para evaluar la continuidad de este tipo de negocios cerca a colegios y grifos de combustibles. Se tratará también una posible reubicación de estos locales.