El Ministerio de Salud ejecuta operativos permanentes de fiscalización en farmacias, boticas y droguerías de todo el país para verificar que los productos farmacéuticos y dispositivos médicos comercializados cumplan con los estándares de calidad, seguridad y eficacia establecidos en sus registros sanitarios.
La Dirección General de Medicamentos, Insumos y Drogas (Digemid) lidera estas intervenciones en coordinación con las direcciones y gerencias regionales de salud (Diresa y Geresa), así como con las Direcciones de Redes Integradas de Salud (Diris) de Lima Metropolitana, con el objetivo de proteger la salud de la población frente a productos que no cumplan las normativas sanitarias.
Inspecciones en farmacias
Paralelamente a las intervenciones en puntos de venta al público, la Digemid inspecciona las droguerías registradas a nivel nacional para verificar el cumplimiento de las órdenes de inmovilización de productos farmacéuticos, dispositivos médicos y productos sanitarios que representan riesgo para la salud.
Estas medidas de inmovilización funcionan como mecanismo preventivo que impide la comercialización y distribución de productos que no cumplen con los requisitos técnicos o que han sido alertados por autoridades sanitarias. Las droguerías, como distribuidores mayoristas, tienen la responsabilidad de acatar estas disposiciones bajo sanción administrativa.
Responsabilidad de establecimientos
Durante las intervenciones, los inspectores de las diferentes instituciones sanitarias enfatizaron que los almacenes especializados, droguerías, farmacias y boticas tienen la obligación legal de cumplir con todas las medidas de seguridad establecidas por la normativa sanitaria vigente.
Esta responsabilidad incluye verificar la procedencia de los productos, mantener condiciones adecuadas de almacenamiento, respetar las cadenas de frío cuando corresponda, y comercializar únicamente productos con registro sanitario vigente y autorización de comercialización.
Fiscalización permanente
La Digemid anunció que continuará ejecutando estas acciones de fiscalización de manera permanente en todo el territorio nacional para proteger la salud pública y garantizar que la población acceda únicamente a medicamentos de calidad comprobada, seguros y eficaces.
Los operativos se realizan sin previo aviso en establecimientos farmacéuticos de todas las regiones, permitiendo detectar irregularidades en tiempo real y aplicar las sanciones administrativas correspondientes cuando se identifiquen infracciones a la normativa sanitaria.





