Doble discurso. Castillo dio un discurso confrontacional, pero luego hizo un llamado a unir fuerzas. (Foto: Presidencia)
Doble discurso. Castillo dio un discurso confrontacional, pero luego hizo un llamado a unir fuerzas. (Foto: Presidencia)

En medio de severos cuestionamientos a su gobierno, el presidente asistió ayer a la plaza de Armas de Ayacucho para dar un balance de los 100 primeros días de gestión. Allí no solo anunció una serie de medidas cargadas de populismo sino que insistió en la convocatoria a una Asamblea Constituyente, punto que no formaba parte de su discurso de 14 páginas.

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“Creo importante manifestarles lo de la Asamblea Nacional Constituyente, que es un grito popular. Lo dijimos ante el Congreso de la República y hoy está a instancia del pueblo. El pueblo organizado tendrá que asumir su propio camino”, manifestó el mandatario.

El evento que estaba previsto para iniciarse a las 10:30 a.m., se retrasó por más de una hora. A diferencia de la ocasión en la que asistió a la Pampa de la Quinua en la misma región para juramentar de manera simbólica a la Presidencia, la cantidad de asistentes fue menor.

Al empezar el discurso, Castillo Terrones entonó un fragmento de la canción “Flor de Retama” y, a continuación, enumeró todos los problemas con los que encontró el país para justificar las críticas a sus 100 primeros días de gestión.

AUSENTE. En el estrado, el mandatario estuvo acompañado de Dina Boluarte (vicepresidenta), Pedro Francke (MEF), Hernando Cevallos (Salud), Aníbal Torres (Justicia) y otros ministros de Estado.

La gran ausente fue la presidenta del Consejo de Ministros, Mirtha Vásquez, quien está en desacuerdo con la permanencia de Walter Ayala (Defensa) tras la denuncia de presiones para ascender a integrantes de las Fuerzas Armadas.

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Vásquez se quedó en Lima y golpeó a Castillo con su ausencia, luego de que este, el miércoles, la dejara mal parada. En su presentación en el Congreso, la premier había deslizado cambios en el MINDEF pero el presidente mantuvo no solo a Wálter Ayala sino al secretario de Palacio Bruno Pacheco, pieza clave en la polémica.

AL CHOQUE. Muy enérgico, el presidente afirmó que logró cosas importantes en estos días, sin embargo, un sector al que calificó con “poca vergüenza” le dice que no ha hecho nada.

“Ellos en estos 200 años se dedicaron a robar. Si en 5 o 10 años no hicieron nada por la patria, hoy quieren que un campesino entre al gobierno y le exigen que en 100 días resuelva los problemas del país”, respondió.

Aseguró que tiene una línea clara impuesta por el pueblo. “A mí nadie me pone la agenda, yo no tengo jefes, mi único jefe es el pueblo”, afirmó.

POPULISMO. Luego, Castillo anunció una serie de medidas que implementará su gobierno en los próximos meses (ver infografía), entre ellas, están las de la lucha contra la corrupción. Por ello, presentará  un paquete de reformas legales y constitucionales.

“No solo sancionaremos al funcionario, sino también a la corrupción. Estamos presentando un proyecto para que se sancione a las personas jurídicas ¡nunca más Odebrecht en el Perú!”, sostuvo.

Uno de los proyectos se enfoca en que las personas con acusación fiscal tengan prohibido  participar en cargos de elección popular.

“Nunca más actos de corrupción o jefes de bancadas criminales deben participar en la política”, detalló.

Por otro lado, se refirió a las medidas que denominó “de austeridad”.

Al respecto, el presidente narró que desde que ingresó al gobierno ha podido ver que muchos funcionarios públicos tienen privilegios, por lo que anunció que firmará una norma que les prohíba viajar vía aérea en primera línea.

“En un gobierno del pueblo, los funcionarios viajarán como cualquier ciudadano de la patria”, afirmó.

Además, anunció que venderán el avión presidencial y que los recursos (producto de la venta) serán destinados a la salud y educación de los niños.

El avión presidencial pertenece a la FAP y se trata de un modelo antiguo: Un Boeing 737-528. En 2007, el gobierno de Alan García quiso venderlo. Su precio base era de apenas 15 millones de dólares. En dos subastas públicas, no se presentó ningún postor.

Castillo también se refirió a un aumento del sueldo: “A partir de diciembre, ningún trabajador formal ganará menos de S/1000 mensuales”.

Sin embargo, por la tarde precisó mediante Twitter que el incremento sería solo por un tiempo.

“Se les pagará un subsidio de S/70.00, aumentado así temporalmente el sueldo mínimo que perciben”, escribió.

Finalmente, el mandatario aseguró que los asuntos políticos y confrontación “impidieron mostrar nuestros logros”.

Se victimiza

“Hago un llamado a todos los empresarios para que inviertan en nuestro país y generen empleo a nuestra gente”, dijo el presidente Castillo durante su discurso desde Ayacucho. Además, cuestionó que cada vez que hable de renegociación del gas de Camisea, algunos sectores lo llamen radical. “Sube el dólar, los precios y dicen que es culpa de Castillo. Lo que en el fondo quieren es que nada cambie y que todo siga igual”, reclamó.

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