A juzgar por lo que dijo ayer, la mandataria Dina Boluarte no le perdona a Alberto Otárola, el primer premier de su gobierno, el haber revelado al país la operación de cirugía nasal que ella quiso mantener en secreto.
Durante casi año y medio, desde el 28 de junio de 2023, Boluarte y el Ejecutivo se empeñaron en mantener dicho tema en reserva hasta que Alberto Otárola, ya fuera del Gobierno, lo confirmó ante la Comisión de Fiscalización. Fue el 3 de diciembre de 2024.
Ayer, durante un acto oficial de inicio de una obra en el Callao, la jefa de Estado trajo a colación este tema y, con visible mal humor, aludió al expremier.
“Y aquel exfuncionario que dijo eso en el Congreso de la República, fue tan cobarde de no responder los cuatro puntos de agenda, y tuvo que agarrarse de las faldas de una mujer cuando él sabía que mi salud respiratoria no era de ese día”, dijo con enérgicas gesticulaciones.
La presidenta reiteró que la cirugía no tuvo un objetivo estético sino uno médico para corregir su tabique desviado y cornetes crecidos, lo que le dificultaba respirar.
Por la tarde, el aludido respondió con deliberada calma.
“El ABC de la política es mantener la cordura y la calma, máxime si se ejerce la primera magistratura de la Nación”, escribió Otárola en X.
“Respetuosamente, sugiero que la señora presidenta cambie el verbo odiar por el de gobernar”, añadió.
DE CIRCO
Boluarte volvió a arremeter contra el Ministerio Público y las investigaciones que ha abierto contra ella, las cuales, a su juicio, dan “vergüenza” en el extranjero.
Aseguró que durante su participación en el Foro Económico de Davos, Suiza, fue elogiada y felicitada por los éxitos de su gestión de gobierno.
“Esas carpetas de circo -remarcó- son las que le abren a la presidenta de la República y damos vergüenza como sistema de justicia en el extranjero (...)”.
Aseguró que, fuera del país, más bien destacan los indicadores de economía peruana.
