Incertidumbre. Transcurridas 36 horas desde que el presidente Pedro Castillo anunció una recomposición del Gabinete Ministerial, solo existe silencio y hermetismo sobre quién reemplazará al cuestionado Héctor Valer en el premierato o los cambios que se realizarán en las carteras ministeriales.
Si bien el mandatario sostuvo ayer una serie de reuniones en Palacio de Gobierno, donde recibió a congresistas, además de integrantes del saliente Gabinete; solo fue Valer Pinto quien salió a la prensa para confirmar su salida de la Presidencia del Consejo de Ministros (PCM). En tanto, el país continúa en vilo frente a la que sería la gestión más inestable de los últimos años y que verá su cuarto equipo ministerial en tan solo seis meses.
DETALLE. El jefe de Estado recibió ayer a los congresistas oficialistas Francis Paredes, Kelly Portalatino y Segundo Quiroz en Palacio de Gobierno. Además, del parlamentario Guillermo Bermejo, de la bancada Perú Democrático, grupo al que también pertenece Héctor Valer.
De acuerdo al registro de visitas, en otro momento y por separado, Castillo Terrones también se reunió con Wilber Supo, ministro de Ambiente; Alfonso Chávarry, titular del Interior; y el comandante general de la Policía, Vicente Tiburcio.
También llegó a la Casa de Pizarro Roberto Sánchez, quien se ha desempeñado desde el inicio de la era Castillo como ministro de Comercio Exterior y Turismo. Sánchez es voceado para asumir el premierato .
No obstante, por la tarde, el presidente se reunió con Roger Nájar, cuyo nombre ha sido propuesto desde el ala dura de Perú Libre en el inicio de la actual gestión.
En tanto, tras actividades propias del sector en diferentes puntos de la capital, los ministros Cevallos y Chávarry fueron consultados sobre la designación del nuevo Gabinete y la posibilidad de que permanezcan al frente de sus respectivas carteras.
“Esa es una decisión del señor presidente (si continuamos), pero nosotros seguimos trabajando de manera normal, a pesar de que estamos en una etapa de incertidumbre en general en el país. Este tema supongo que se va a resolver a la brevedad y mientras tanto aquí seguimos trabajando”, dijo Cevallos.
“Yo sigo trabajando hasta que se disponga lo conveniente, pero yo continúo con mi trabajo en la lucha contra la inseguridad”, respondió, por su parte, Chávarry.
En ese contexto, vía Twitter, el parlamentario Edward Málaga (Partido Morado) informó que rechazó la posibilidad de asumir el Ministerio del Ambiente luego de que fuera contactado por “alguien del entorno presidencial”.
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PASO AL COSTADO. De otro lado, desde los exteriores de la sede de la PCM, el renunciante premier Héctor Valer confirmó su salida del cargo, tras conocerse, entre otros aspectos, las denuncias de que agredió a su hija y esposa.
“Vengo a decirles que acepto la derrota ametrallado por los periódicos del Perú que pertenecen a un grupo (…) que construyeron una imagen de maltratador y de violento de este combatiente. Han herido a un premier y por eso se retira a sus cuarteles para curar sus heridas y volver cuando el pueblo así quiera”, indicó.
Valer dijo que presentó a Castillo la carta en que pone su cargo a disposición e indicó que el mandatario “no es comunista” y solo “quiere del Perú que sea un Estado de bienestar”. También señaló que existen discrepancias entre el mandatario y el programa que impulsa el fundador y secretario general de PL, Vladimir Cerrón.
En otro momento, Valer sostuvo que, si el Tribunal Constitucional no hubiera emitido su fallo sobre la cuestión de confianza, el Gobierno hubiera tomado el rechazo del Congreso a la presentación del Gabinete como una denegación fáctica. Es decir, iniciaba el camino para una disolución.
REACCIÓN. Más tarde, vía Twitter, Vladimir Cerrón acusó a la bancada de Perú Democrático, a la que pertenece el también parlamentario Héctor Valer, de haber buscado -desde su formación- “capturar ministerios, condición que en Perú Libre les estaba negada sin respaldo de todos sus integrantes; solo uno no tiene esa ambición. “Es culpable de llevar al Gobierno a dos crisis de Gabinete por su angurria”, señaló.
Horas antes, el congresista Guillermo Bermejo, integrante de la referida bancada, indicó que “no tenían en el radar” los problemas legales y denuncias por agresión que tenía Valer. De haberlo sabido, reconoció, “nuestra lectura hubiera sido diferente”.
EL PEOR. Así la situación, el régimen de Castillo se presenta como el de mayor inestabilidad, al menos desde 1995. La fugacidad de sus primeros ministros -4 gabinetes en 6 meses– no ocurrió ni siquiera en el breve gobierno de Martín Vizcarra que duró apenas 2 años (marzo de 2018 a noviembre de 2020). Vizcarra requirió un cuarto Gabinete Ministerial al cabo de 2 años y 4 meses. Este fue presidido por Pedro Cateriano, aunque su gestión solo duró 22 días.
Un rápido paralelo del gobierno de Castillo con los de Alberto Fujimori (en sus dos periodos), Alejandro Toledo, Alan García Ollanta Humala, Pedro Pablo Kuczynski y Martín Vizcarra, arriba a esta conclusión: todos, salvo Castillo, conformaron un cuarto gabinete pasados los dos años de gestión.
El cuarto gabinete de Alberto Fujimori (de los 6 que tuvo en el primer gobierno) fue conformado tras 2 años y 8 meses; y fue presidido por Óscar de la Puente Raygada. En su segunda gestión, requirió el cuarto gabinete transcurridos tres años (Gabinete Pandolfi).
Alejandro Toledo solo tuvo 5 gabinetes en todo su gobierno. El cuarto, a los 2 años y 3 meses, con Carlos Ferrero Costa. Los gabinetes de Alan García (segundo gobierno) fueron los más estables. Solo tuvo 5 en 5 años. El cuarto Gabinete Ministerial (con José Chang a la cabeza) fue necesario en el cuarto año de gestión.
Ollanta Humala tuvo necesidad de siete gabinetes pero, aún así, pasaron 2 años y 3 meses para conformar un cuarto grupo de ministros. Por último, Vizcarra, pese a la brevedad de su gestión, culminó abruptamente su mandato con 5 gabinetes a cuestas.
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