Presidente del Parlamento cerró el periodo anual de sesiones sin acercarse a los periodistas y la jefa de Estado está a punto de viajar a China sin responder a los medios.
Presidente del Parlamento cerró el periodo anual de sesiones sin acercarse a los periodistas y la jefa de Estado está a punto de viajar a China sin responder a los medios.

Dina Boluarte y Alejandro Soto, los presidentes de dos poderes del Estado elegidos para el Ejecutivo y el Congreso por voto popular, tienen un común denominador: el silencio frente a la prensa.

La presidenta de la República y el saliente titular de la Mesa Directiva del Congreso llevan meses sin atender los requerimientos de los periodistas y se niegan a dar explicaciones de sus gestiones, las críticas a su labor o cómo enfrentan la crisis política, social y económica que vive el país.

CURA DE SILENCIO

La jefa de Estado cumple hoy 73 días sin responder a los periodistas. La última vez que ofreció una conferencia de prensa fue el 5 de abril de este año cuando -obligada por la coyuntura- dio la cara para explicar que los relojes Rolex y las joyas que tenía en su poder fueron un préstamo de su “wayki”, el gobernador regional de Ayacucho Wilfredo Oscorima.

Sin sonrojarse, la jefa de Estado señaló que “fue un error” aceptar prestado los relojes de alta gama, mientras que sobre las joyas sostuvo que eran de la marca Unique.

Después de ello, buscando un canal a través del cual informar sin tener que responder a la prensa, el 3 de mayo la mandataria nombró a Fredy Hinojosa vocero de la Presidencia de la República.

OTRO MUDO

Alejandro Soto (Alianza para el Progreso) cumple 302 días en silencio ante la prensa.

La última entrevista que brindó el todavía presidente del Parlamento fue el 22 de agosto del año pasado a “RTV El Diario de Cusco”, cuando atacó a los medios de la capital en lugar de responder a los cuestionamientos.

En Lima, Soto habló por última vez con periodistas el 18 de agosto, en una conferencia de prensa en la que refutó acusaciones sobre la denominada “ley Soto”, una ley de prescripción aprobada en el Congreso que lo salvó de una condena por estafa.

El pasado sábado, Soto cerró el periodo anual de sesiones 2023-2024 y ni siquiera por eso se acercó a la prensa.

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