El último en asegurar ante la Comisión de Justicia del Congreso que jamás recibió presiones de parte de la Junta Nacional de Justicia (JNJ) fue el presidente del Poder Judicial, Javier Arévalo Vela.
Lo dijo cargado de emociones, con incomodidad y, sobre todo, con un matiz despectivo sobre cierta prensa.
Todo ello, por la investigación periodística que reveló que integrantes de la JNJ intentaron coaccionar a jueces para defender a la exfiscal de la nación Zoraida Ávalos en el juicio político que enfrentó en el Congreso.
“Eso es un chisme. A mí nadie me presiona. Entonces, acá está, esto lo he dejado pasar porque lo que dijera iba a ser deformado por la prensa”, fueron sus palabras.
No obstante, los que lo precedieron tuvieron la misma sintonía y negaron esas presiones.
DESCARGOS
Primero fue el juez César San Martín. Él llegó al citado grupo para comparecer por la investigación contra los miembros de la JNJ. El magistrado descartó alguna presión.
“El pedido de la Sala Plena fue regular y sin injerencias externas al Poder Judicial. Tampoco lo permitiría, por cierto”, declaró.
Lo que sí dijo fue que, hasta en dos oportunidades, la Sala Plena debatió el comunicado. Las fechas fueron el 28 de junio y el pasado 3 de julio. Pero se rechazó emitirlo
Lo propio hizo su colega Elvia Barrios. Ella confirmó esa versión y sostuvo que en la primera oportunidad hubo 14 jueces supremos presentes y que, al no contar con los 19 totales, la sesión se postergó. Luego, se votó y se decidió no emitir ningún tipo de pronunciamiento. Refirió que todo fue legal.
Cuando Barrios salió de la Comisión de Justicia, Correo la abordó y se reafirmó en sus dichos. “¡A mí nadie me presionó! No me presionan, ni permitiría que me presionen”, dijo.
Lo mismo replicó la vocal suprema Janet Tello. Ella afirmó que no sufrió ni fue objeto de ninguna presión.
“Tampoco he presionado a nadie ni al presidente del PJ ni a mis colegas”, dijo.