El Perú está tan asediado por la inseguridad ciudadana que hasta el personal de seguridad que escoltaba a David Gómez Boluarte, hijo de la presidenta Dina Boluarte, fue víctima de los embates de la delincuencia.
Todo ocurrió el pasado lunes a las 10 y 21 de la noche. El lugar de la noticia fue el frontis del inmueble ubicado en el jirón Oswaldo Hercelles 277, en la urbanización Santa Catalina (La Victoria) y solo las cámaras de seguridad fueron testigos del acto.
En las imágenes difundidas, se pudo apreciar cómo el vehículo blanco en el que iba a bordo la seguridad de Gómez fue asediado por tres sujetos cubiertos con pasamontañas.
Los maleantes descendieron de un auto negro y raudamente encañonaron y redujeron al capitán Nelson Pineda Lazo y al suboficial de segunda Joseph Cáceres.
Así, los mencionados fueron asaltados y despojados de sus armas. En el acto se perdió una pistola Sig Sauer de calibre 9 milímetros y otra de la misma marca. También, un celular, documentos y otras pertenencias.
Todo ello ocurrió mientras la seguridad esperaba que el hijo de la presidenta Boluarte saliera del inmueble.
Decisiones. Sobre el tema, hubo múltiples reacciones desde distintos sectores, pero, principalmente de autoridades del gobierno para cuestionar a los propios agentes.
El ministro Víctor Torres (Interior) manifestó que se abriría un proceso disciplinario contra los escoltas porque sufrieron el robo debido a que se quedaron dormidos.
“Quiero aclarar que el robo no ha sido a la escolta de la señora presidenta Boluarte, sino a la escolta de su hijo sin que el hijo esté presente, cosa que está mal”, aseveró en el inicio de su declaración.
Luego, agregó: “Se están tomando las medidas disciplinarias con ese personal porque ese personal de seguridad se encontraba aletargado, semidormido y fue objeto de este robo. Eso no está bien”.