El Parlamento, en ejercicio de sus facultades de control político, interpeló anoche a los ministros Rómulo Mucho Mamani (de Energía y Minas) y Raúl Pérez-Reyes (Transportes y Comunicaciones).
Este procedimiento, de acuerdo con el reglamento legislativo, es el primer paso para una eventual censura o destitución, de ser el caso.
El ministro Rómulo Mucho Mamani, experto en minería y también empresario minero, es interpelado por un presunto conflicto de interés por ser propietario de una firma que tiene como cliente a Southern Perú, lo cual explicaría su interés por reactivar el proyecto Tía María, en Islay, Arequipa.
Varias de las 18 preguntas giraron alrededor de la relación del ministro con la empresa Pevoex Contratistas S.A.C. y la de esta firma con Southern Perú.
Mucho informó que es fundador de Pevoex Contratistas S.A.C. , del cual es propietario del 64% de acciones, y que renunció al cargo de gerente general el 13 de febrero de 2024.
Asimismo dijo que cedió la administración judicial de la firma a su esposa e hija mediante un trámite en el Poder Judicial.
AGUA SÍ, MINA NO.
Las intervenciones parlamentarias configuraron un típico debate ideológico entre “antimineros” y “promineros”.
Según Margot Palacios (Perú Libre) estaba claro “que este ministro es pro minero y por eso entró [al Gabinete] y dijo Tía María,va; Conga, va. El pueblo dijo agua sí; mina, no”.
“Percibo en mis colegas un tufillo antiminero”, intervino Eduardo Salhuna (APP).
Remarcó que Perú es un país minero: “si uno revisa datos estadísticos [verá] cuánto contribuye el sector minero al erario nacional,a los tributos, la tecnología, a la dinámica económica y social en el interior del país”.
Precisó que tampoco se trata de imponer los proyectos a sangre y fuego sino proviendo el diálogo.
CONTROLADORES.
Más temprano, respondió 17 preguntas el ministro Raúl Pérez-Reyes (MTC), la mayoría relacionadas con la crisis generada por el pequeño grupo de controladores aéreos de la aviación civil en los aeropuertos del país.
La moción legislativa sostiene que el ministro no cumplió con su promesa de reorganizar la Corporación Peruana de Aeropuertos y Aviación Civil (Corpac).
La deficiencia de los controladores de tráfico aéreo generó retrasos y cancelaciones de vuelos, perjudicando a turistas nacionales y extranjeros, en febrero último y una huelga en 2022.
Al respecto el titular del MTC admitió que hay un claro déficit de personal de controladores áereos y que se va a capacitar a miembros de la FAP en esta labor.
La legisladora Adriana Tudela cuestionó el virtual monopolio del sindicato de controlares aéreos sobre esta profesión en el país, y la debilidad del MTC que, a su juicio, cedió a “los chantajes” de aquel sindicato.
“Necesitamos más controladores aéreos. Hay que abrir y quitarles el nonopolio (...) a estos grupos con pequeñas cuotas de poder”, planteó.
