El primer ministro Ernesto Álvarez defendió este viernes el acuerdo militar suscrito con Corea del Sur para la adquisición de 195 tanques K2 y vehículos blindados destinados a modernizar el equipamiento del Ejército peruano. Durante un encuentro con la Asociación de Prensa Extranjera en Perú (APEP), el titular de la Presidencia del Consejo de Ministros justificó la inversión en armamento como parte de una “necesidad imperiosa” para recuperar la capacidad disuasiva del país.
“Todos tenemos que tener cierto nivel de capacidad disuasiva y eso, más que una exigencia, es una necesidad imperiosa”, señaló Álvarez
Reemplazo de tanques soviéticos y vehículos obsoletos
El jefe del Gabinete Ministerial subrayó que la compra de los vehículos blindados permitirá al Ejército recuperar la capacidad operativa que había perdido por el deterioro de sus unidades. Explicó que muchos de los equipos en servicio ya no cumplen con los estándares mínimos de operatividad y requieren ser sustituidos con urgencia.
“El Ejército está recuperando la capacidad perdida de trasladar tropas en camiones blindados. Y eso lleva de la mano adquirir tanques de primera línea en remplazo a los T-55 soviéticos, que ya no tienen ninguna capacidad disuasiva (...) están absolutamente desfasados”, explicó.
El premier indicó que los tanques T-55 de origen soviético que aún opera el Ejército peruano quedaron completamente desfasados en términos tecnológicos y estratégicos, lo que justifica su reemplazo por equipos modernos como los K2 de fabricación surcoreana.
Fuerza Aérea con capacidad operativa limitada
El primer ministro también se refirió a la crítica situación de la Fuerza Aérea del Perú (FAP), cuya flota de aviones de combate Mirage 2000, de fabricación francesa, se encuentra al final de su vida útil. En ese sentido, reveló que actualmente solo una de esas aeronaves está operativa, lo que evidencia la urgencia de una renovación integral.
“La Fuerza Área Peruana había perdido parte de capacidad disuasiva y eso no puede permitirse en ningún país”, indicó.
Por ello, anunció que el Gobierno destinará 3,500 millones de dólares para la adquisición de nuevas unidades que reemplacen a los Mirage 2000 y devuelvan capacidad operativa a la aviación militar peruana. El titular de la PCM enfatizó que la pérdida de capacidad disuasiva en el ámbito aéreo representa un riesgo estratégico que ningún país puede permitirse.
Donación de helicópteros Black Hawk de Estados Unidos
Por otra parte, Álvarez Miranda confirmó que el Perú recibió esta semana un segundo lote de tres helicópteros UH-60 Black Hawk donados por Estados Unidos, como parte de un acuerdo firmado en octubre del año pasado que contempla la entrega de nueve naves en total. Según explicó, estas aeronaves reforzarán las operaciones de la Policía Nacional y las Fuerzas Armadas en la lucha contra el narcotráfico y el crimen organizado en zonas de difícil acceso.
El primer ministro destacó también la reunión sostenida con expertos en seguridad y miembros del FBI de Estados Unidos para recibir asesoramiento técnico en la lucha contra el crimen organizado, en el marco de una cooperación bilateral que busca fortalecer las capacidades de inteligencia y operativas del Estado peruano.





