El presidente del Congreso, Eduardo Salhuana, admitió reuniones y una relación fluida con dirigentes de lo que llamó “pequeña minería y minería informal”, tanto en Madre de Dios como en su despacho congresal, pero niega que sean 65 veces entre 2023 y 2024.
“La actividad ilegal es una cosa que nadie respalda desde el Congreso de la República, menos el que habla”, aseveró en Canal N.
Frente a las numerosas evidencias de su vinculación cercana con la minería ilegal en Madre de Dios, región de la que es el único representante parlamentario, Salhuana evitó sistemáticamente hablar de minería ilegal y prefirió hablar de “minería informal o pequeña minería”.
“No puedo decir cuántas reuniones sostuve (con mineros “informales”) pero 65 reuniones es imposible. Deben ser 65 personas. Lo que pasa es que a veces recurrían a mí para poder ingresar al Congreso a través de mi vocería de la bancada de APP, y no necesariamente para reunirse conmigo sino con otros parlamentarios”, dijo en Canal N.
Intentó durante toda la entrevista limpiar su imagen de las imputaciones indebidas con el conglomerado ilegal de la actividad minera.
Reconoció que ha respaldado con su firma proyectos de ley para favorecer a “la pequeña minería y minería informal”, sector al que la Fiscalía y Policía Nacional identifican con la minería ilegal.
“Pero ninguno está referido a temas de minería ilegal”, remarcó.
EL MÁS CERCANO.
Una investigación de “Cuarto Poder” Cuarto Poder” confirmó que, desde enero de 2023 hasta junio de 2024, el congresista Eduardo Salhuana ha recibido a 65 dirigentes mineros no formales.
Esta actividad ilegal moviliza a personas, también dinamita, explosivos, extorsiones, trata de personas.
Pese a ello, Salhuana y varios legisladores aseguran que el Reinfo aún debe continuar, brindado un escudo protector a los informales (ilegales).