"Me gustaría que mi libro sea traducido al quechua, estaría muy feliz, me arraigaría muchísimo más a mi país”. Foto: GEC
"Me gustaría que mi libro sea traducido al quechua, estaría muy feliz, me arraigaría muchísimo más a mi país”. Foto: GEC

La escritora Claudia Ulloa ha vivido la mitad de su vida fuera del Perú enseñando a extranjeros su lengua materna, el español, y la publicación de su primera novela “Yo maté a un perro en Rumanía” (Random House), no es excepción, pues en el primer capítulo de la ficción un perro es el narrador inicial de la historia dando detalles del entendimiento y la forma del lenguaje que también está presente en los canes.

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“Es curioso que un perrito aparezca abriendo el primer capítulo de la historia, y hablándote de cosas existenciales como la muerte o el lenguaje, sobre la comunicación, un ser que aparentemente no es racional y aparece siendo el personaje más racional de la novela”, comenta Claudia a Correo.

¿Cómo nace esta historia?

Hay una serie de factores que me llevan a escribir esta historia, entre estos están, mi experiencia laboral en una veterinaria, un viaje que hice a Bucarest, mi trabajo como profesora de lengua extranjera en otro país, y (el ver) como un extranjero ve mi lengua materna.

¿Qué semejanza es la que haces entre el perro y el ser humano?

El duelo es una cosa muy interesante y compleja y creo que el duelo se atraviesa por una mascota y por un familiar también, pero se atraviesa de maneras distintas. (...) El duelo de la mascota es más silencioso.

¿Es intencional que quien narre la historia sea un animal?

Sí, de hecho, era mi intención más grande que fuera como una fábula en donde el perro sea el narrador que contara la historia de estas dos personas en un viaje, en esta relación de amistad que se lee en el libro, pero fue muy difícil sostener la voz de este perro a lo largo de todo el libro. Entonces, empecé a explorar otras posibilidades para construir el texto.

¿Así es como aparece la voz de esta mujer latinoamericana?

Al principio es como estar muy dentro de ella, yo me pongo también como lector y cuando he leído mi manuscrito estas como envuelto en su nube de depresión y poco a poco va saliendo ella, y aparece este amigo que la jala y se va abriendo la historia y llegan los pensamientos de él con discursos larguísimo.

¿El personaje femenino es muy distinto al común de las novelas latinas?

Sí, esta mujer no es una heroína, no pertenece a un matriarcado, no sabemos casi nada de ella. Sabemos que está enferma porque clara mente está atravesando una depresión y está en su estado más vulnerable.

¿Ha sido tu propósito evidenciar una problemática de la salud mental desde la literatura?

Fue totalmente inconsciente, nunca pensé que mi novela tratase de la salud mental cuando es totalmente evidente y obvio, pero fue una cosa que me impactó.  (...) Para mí la novela empezó y sigue siendo una novela sobre la amistad, el viaje y el lenguaje

¿Sobre qué querías escribir?

Yo quería escribir sobre este viaje, sobre esta amistad, amistad que parece un enamoramiento. Creo que uno también se enamora de sus amigos y amigas, más allá de nuestras preferencias o gustos de parejas; y también sobre el lenguaje, sobre las palabras, porque es lo que me concierne y me interesa.

Es importante entender e interpretar el lenguaje...

Es importantísimo porque la comunicación es lo que nos acerca, yo llevo la mitad de mi vida viviendo fuera y desde afuera reflexionando sobre mi lengua materna, (...) y el cómo es posible que el quechua no se haya institucionalizado (...) Si no conocemos el idioma y lengua de nuestro prójimo esa comunicación siempre será muy difícil.

¿Por qué recomendarías leer tu libro?

Pienso que ahora que es verano es un libro que podría bajarte la temperatura porque sucede en un invierno, en lugares grises. (Risas) No sé, si alguien está interesado en las relaciones humanas, en la amistad, en el gusto o amor por los animales y sobre todo por las palabras, creo que podría ser una buena idea comprárselo.

SOBRE LA AUTORA

Claudia Ulloa, escritora

Estudió Turismo en Lima y continuó sus estudios en Noruega, en donde obtuvo el grado de bachiller en Sociología y de magíster en Lengua. Sus relatos han sido traducido al francés, inglés, portugués y sueco.

1979 nació la escritora Claudia Ulloa en Lima.

2006 publicó “El pez que aprendió a caminar”.

2017 incluida en Bogotá 39, de los mejores escritores.


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