La Plaza de Armas de Arequipa es quizá la más bella de todas las regiones del sur, incluso hasta de la propia Plaza de Armas de Lima, y es que la singularidad que tiene es su imponente Catedral de dos torres, no solo ello, sino también los portales, las palmeras, la pileta, incluso cerca a la plaza mayor se encuentran ocho iglesias y cada una con su propio estilo.

Según el libro Calle, plazas y puentes de Arequipa del historiador Rommel Arce, señala que la plaza mayor de Arequipa toma el nombre de Plaza de Armas debido a que allí se realizan los desfiles cívicos y militares de la ciudad.

Visitantes nacionales y extranjeros acuden a la plaza de Arequipa. (Foto: GEC)
Visitantes nacionales y extranjeros acuden a la plaza de Arequipa. (Foto: GEC)


En el siglo XIX, los portales alrededor de la plaza lucían de un solo piso, incluso funcionaba como centro de abasto. De acuerdo al escrito, el Portal de San Agustín es en referencia a la Universidad Nacional de San Agustín, que fue fundada el 11 de noviembre del 1828, en tanto el Portal de la Municipalidad es porque allí funcionó el cabildo o municipio desde la época de la colonia. Mientras que el Portal de Flores es por el recuerdo del Alférez Real Juan Flores del Campo, fundador de Camaná.

La Plaza de Armas de Arequipa, también fue testigo de hechos históricos, entre ellos, el fusilamiento del general Felipe Santiago Salaverry por perder la batalla de Socabaya en 1836. Horas antes de su muerte, el 17 de febrero de 1836, escribió una carta para su amada esposa Juana. Su carta está escrita en una placa y colocada en el Portal de la Municipalidad.

Igual suerte corrió el general venezolano Trinidad Morán, quien fue fusilado en la Plaza de Armas por orden de Domingo Elías, a raíz de la guerra civil entre el presidente José Rufino Echenique y el general Ramón Castilla. Era el año de 1854″, dice Rommel Arce en su libro.

La Plaza de Armas también fue escenario de protestas históricas, entre ellas, la del llamado “Arequipazo”, las manifestaciones fueron en contra del gobierno de Alejandro Toledo porque intentó privatizar Egasa.

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Pero también fue escenario de alegrías porque la población copó todo el perímetro cuando se armó una pantalla gigante para observar la final del partido por Copa Sudamericana entre Cienciano y River Plate en el 2003. Asimismo, cuando Melgar campeonó en su centenario en el 2015.

Por otra parte, hasta la primera década del siglo XXI, el tránsito vehicular en la Plaza de Armas era normal, incluso hasta la calle Mercaderes, hoy solo se permite el paso vehicular al frente del Portal de la Municipalidad.

La Catedral de Arequipa ha soportado varios terremotos, el más reciente fue del 23 de junio del 2001. El movimiento telúrico provocó que la torre izquierda se caiga, mientras que la torre derecha quedo a la mitad. Su restauración terminó un año después.

El reloj de la Catedral tiene una huella histórica y es que aguarda en su estructura una bala perdida que se registró en la llamada “revolución del 50″ por enfrentamientos entre la población arequipeña y los militares del régimen de Manuel Odría.


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