Juan Guillermo Carpio Muñoz (Arequipa, 1945–2019), además de sociólogo, historiador y autor de numerosos libros de la cultura arequipeña, fue un apasionado de la tauromaquia que difundió a través de artículos, libros, programas y documentales, que superaron las fronteras nacionales. Fue amigo personal del pintor costumbrista y taurino, Goyo Menaut, que dedicó más de cincuenta años a este género del arte.
Nombrado “Hijo Predilecto de Arequipa” y autor de la influyente obra histórica en varios volúmenes “Texao”, Juan Carpio Muñoz dedicó al polémico arte de la tauromaquia libros como “El vuelo fugaz” (2006, 350 pp) una obra en formato pequeño que reúne una variada producción de poemas, ensayos y crónicas sobre diferentes aspectos de la afición taurina, conocido en países como España, Francia y los Estados Unidos. Su amigo Goyo Menaut ilustró el libro con varios dibujos a tinta.
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HIJO PREDILECTO
Además, Juan Carpio publicó “Surco, pasión y gloria: Tratado de cultura loncca y tauromaquia arequipeña” (2011, 503 pp), una obra monumental de gran formato, ampliamente ilustrada. En medio de una intensa vida profesional, Carpio Muñoz fue miembro de la Asamblea Constituyente del Perú y Congresista de la República, entre los años 1992 al 1995.
En 1995, le fue conferido el Premio Nacional del Folclor y la Medalla “Kuntur”. La Fundación Cultural Alfonso Bouroncle Carreón le otorgó el Premio Excepcional al Mérito y la UNSA, el Diploma de Honor, entre otros reconocimientos por su dedicación al cultivo de los valores culturales de su tierra.
En su obra texao, Carpio Muñoz recoge numerosos datos importante de la historia de Arequipa. Le llevó más de dos décadas procesar 14 mil fichas de la historia, tradiciones, costumbres de la picantería y relatos de la ciudad que crecieron al pie de Misti, las mismas que fueron resumidas en siete mil veinticuatro hojas que están agrupadas en 14 tomos, dando origen a la obra inédita “Texao, Arequipa y Mostajo. La Historia de un Pueblo y un Hombre”. Carpio Muñoz, señaló que Francisco Mostajo fue como la flor del Texao, la más rebelde y relata que Mostajo en su vida fue en contra del sistema, fue silvestre y solitario. En palabras del arequipeñista,”la historia de uno, es la biografía del otro”.
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PINTOR TAURINO
Por su parte, el artista costumbrista y taurino Goyo Menaut, (Arequipa, 1928–2023), diestro en la representación de toreros y astados, trabajó más de cincuenta años con pinceles, carboncillos y óleos. Precisamente, ilustró con inspirados dibujos a tinta el libro de tauromaquia “El vuelo fugaz” de Carpio Muñoz, una de tantas colaboraciones entre ambos amantes de la fiesta brava y de sus manifestaciones regionales.
Meses antes de su desaparición, Goyo Menaut montó una de sus últimas exposiciones denominada: “50 Años por los Ruedos”, en la que presentó obras maestras, como: Toros para Acho, Manolete, Corrida Pueblerina, Feria del Señor de los Milagros, El arequipeño, Francisco Pizarro, En compás de espera, Ilusión Torera, entre otros. Este último reflejó sus sueños juveniles de ser torero, ilusión que abandonó para dedicarse a las artes plásticas.
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Además, la muestra exhibió las obras: Patio de Cuadrillas, Pelea de Toros, Los toritos y la luna, La despedida de Cristina Sánchez, Andresito Roca Rey y El Matador.
Goyo Menaut, artista autodidacta, vivió sus primeros años junto a su madre, en una antigua casona de la calle La Merced. A los ocho años y con estudios de segundo grado de primaria, que estudió en la Escuela Fiscal Nº 951 de la Calle Moral, viajó a Lima en busca de un futuro mejor.
De esta forma, iniciaría su larga carrera en el mundo de las artes plásticas vinculadas a la tauromaquia y el arte costumbrista que en el Perú tiene tantos aficionados en las diferentes regiones de la costa y la sierra.
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