Los trabajadores directos e indirectos del proyecto minero Las Bambas volvieron a salir a las calles de Arequipa para pedir que el Gobierno central ayude a solucionar el conflicto que existe con los comuneros de la región Apurímac.
Los manifestantes recordaron que, tras la paralización de las operaciones, son 50 días que los servidores dejaron de trabajar, lo cual afectó a miles de familias, negocios, emprendimientos, pequeñas empresas, entre otros.
Invocaron a los pobladores de Fuerabamba a no ser intransigentes y buscar el diálogo para solucionar el conflicto, luego que la tarde del martes los pobladores de Huancuire quemaron parte de las instalaciones de la empresa minera.
A través de un comunicado, Las Bambas informó que un grupo de trabajadores junto a la Policía intentó ingresar al campamento Charcascocha para evacuar los lodos de la planta de tratamiento de aguas residuales.
Sin embargo, no pudieron ingresar, porque los pobladores reaccionaron de forma violenta y dejaron algunos heridos.