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La faz oculta de Arequipa es un libro que todo arequipeño debe leer. Se menciona grandes sucesos de la historia de Arequipa en el siglo XX. Resume una parte interesante de la identidad de la gente que vivía a las faldas del volcán Misti, plasmado por el filósofo y abogado Antero Peralta Vásquez (1900 – 1980).
Saulo Peralta Franzis, docente de la Universidad Católica de Santa María y la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, es nieto de Antero Peralta y lo recuerda como un intelectual bastante enérgico, pero muy humanista. Tenía una estrecha relación amical con José Carlos Mariátegui y Víctor Raúl Haya de la Torre.
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¿Qué se puede resaltar del libro?
Mi abuelo Antero Peralta Vásquez fue un intelectual, filósofo y abogado. Dejó un legado a la ciudad, escribió libros, pero “La faz oculta de Arequipa” es de obligatoria lectura donde describe grandes partes de la historia de Arequipa del siglo XX. Reseña los movimientos revolucionarios de intelectuales como José Bustamante y Rivero, Aníbal Fernández, entre otros. Escribió varias novelas como “El Sargento Chipana”, “Walaycho”, tiene como 20 obras publicadas y que son estudiadas en las facultades de letras del Perú.
¿Cómo era la relación con José Carlos Mariátegui y Víctor Raúl Haya de la Torre?
Tuvo una relación estrecha con José Carlos Mariátegui, era su consultor del pensamiento inca y lo menciona en los siete ensayos de la realidad peruana. Tenía otra relación muy estrecha con Víctor Raúl Haya de la Torre, mi abuelo fue el que fundó el partido del Apra, porque la primera cédula el partido se fundó en 1924 en Arequipa. En ese entonces Haya de la Torre estaba deportado en México y allí forma la Alianza Popular Revolucionaria Americana (Apra). Mi abuelo le dice que quería fundar una representación igual en Arequipa.
¿Llevó sus conocimientos a las aulas?
Si, como profesor de la Unsa en filosofía, San Marcos y la Universidad Mayor San Andrés de Bolivia. En esa época la educación era limitada para un porcentaje del país. Ahora vivimos el resultado de la lucha que ellos tuvieron en esos tiempos.
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La política fue una de las facetas de su abuelo, ¿Cómo hizo con las dictaduras?
Los intelectuales fueron perseguidos. Amaban mucho al ser humano y eso lo llevó a sacrificar gran parte de su vida, fue perseguido, encarcelado en Frontón y deportado a Chile y Bolivia. Todo eso lo entregó al país sin nada a cambio, nunca se benefició de la política. Fue un gran aporte al país, lo entregó todo a cambio de nada. Murió pobre, con su sueldo de jubilado de la universidad. No se dedicó a acumular bienes materiales, pero si a sus ideales y lucha política, fue un luchador social.
¿Llegó a ocupar un cargo en la política?
Fue de los pioneros en formar partidos políticos modernos del Perú. Después del Apra en 1924, también interviene en la fundación del Frente Democrático Nacional en 1944 que llevó a la presidencia de José Luis Bustamante y Rivero (1945 - 1948), mi abuelo acompañó como diputado, pero era complicado formar un gobierno democrático.
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¿Dónde vivía su abuelo?
En el Tambo Ruelas, en Antiquilla, ahora es patrimonio de Arequipa porque es una construcción virreinal, todo de madera. Fue de propiedad de mi abuelo, una casona histórica, enorme con una serie de viviendas. Allí se reunían con políticos como Bustamante y Rivero, Haya de la Torre, Luis Alberto Sánchez, entre otros. Se puede visitar, es un lugar que fue remodelado, está muy bonito.
Una calle de Yanahuara lleva el nombre de su abuelo, ¿Cómo se siente?
Bien. Fue en la alcaldía de José Villalobos Ampuero. Se puso el nombre de mi abuelo en la calle que queda al frente de la Universidad Católica de Santa María. También en el parque que se encuentra a la subida de Vallecito.
