Policía de Arequipa investiga dos casos de posible parricidio

Dos padres de familia son investigados por los detectives de Homicidios de la Divincri por presuntamente atentar contra la vida de sus propios hijos. Los hechos ocurrieron al interior de sus viviendas ubicadas en los distritos de José Luis Bustamante y Rivero y Socabaya.

Marcelino O. A. (29) ingresó al área de Emergencia del hospital Honorio Delgado Espinoza a las 19:00 horas del martes, tras ser trasladado por su hermano desde el asentamiento humano Horacio Zeballos Gámez del distrito de Socabaya. Los médicos no solo atendieron al obrero por haber ingerido una sustancia tóxica, la que también tomó su hijo de cuatro años, que también había bebido la misma sustancia.

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Tras la atención médica recibida, el obrero fue dado de alta la mañana de ayer, pero antes de que pudiera abandonar el hospital, tres agentes de Homicidios de la Divincri lo intervinieron para ser investigado por el presunto delito de parricidio.

Según el trabajador, intentó acabar con su vida al interior de su auto y frente a su hijo por los constantes maltratos de su pareja, incluso aseguró que hay una denuncia policial por violencia familiar contra la madre del pequeño y antes de beber el tóxico le dijo a su hermano dónde se encontraba. Agregó que no trató de matar a su hijo y que si el niño bebió el mismo líquido fue por error, pues antes le había pedido a su hermano que se hiciera cargo de su menor hijo.

La intervención del padre de familia es para establecer si su versión es cierta, a través de entrevista en la cámara Gessel.

MADRE E HIJA MUERTAS

Mientras el trabajador y su hijo eran atendidos por la intoxicación en el hospital regional, el personal policial de la comisaría de Simón Bolívar, en José Luis Bustamante y Rivero, fue alertado de un hecho similar, pero que tuvo consecuencias fatales.

Los efectivos policiales se movilizaron hasta una de las viviendas ubicadas en la cuadra 8 de la calle Azángaro de la urbanización Mi Perú y en el segundo piso de la casa se hallaron los cuerpos de Luz M. M. (19) y el de su hija que tenía tan solo cuatro meses. Ambas estaban boca arriba sobre la cama y en la mesa de noche, los policías hallaron una jarra con un líquido que desprendía un fuerte olor.

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Según el obrero Roger S. Q. (22), a las 23:30 horas ingresó a su casa y encontró a su esposa e hija sin vida al interior de la habitación que compartían. Afirmó que como pareja no tenían ningún problema y se presume que, aparentemente, la menor habría muerto asfixiada por una negligencia de la madre que pudo haberle cortado la respiración mientras dormían.

Los detectives de Homicidios realizan diligencias para esclarecer ambos casos.

Una menor de 14 años y una joven de 19 también perdieron la vida el lunes en Cerro Colorado, tras ser víctimas de bullying y abuso sexual