Con bombos y platillos, el 23 de mayo último, el alcalde de Nuevo Chimbote, Walter Soto Campos, realizó la inauguración del colegio N° 89541, situado en el asentamiento humano Los Constructores, y aseguró que la infraestructura educativa ya se encontraba lista para ser usada por los 500 alumnos del nivel primaria.
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Sin embargo, hasta el momento los estudiantes no pueden utilizar la nueva infraestructura -que costó S/ 3.3 millones- debido a que la obra presenta observaciones que deben ser subsanadas por la empresa constructora.
“La construcción ya fue culminada, incluso ya se inauguraron las instalaciones de nuestra institución educativa, pero aún no nos dan las llaves para poder utilizarlas porque hay inconsistencias que la constructora debe levantar”, declaró la directora del plantel, Gloria Rosales Vargas.
ROBOS
Debido a esta situación, los alumnos de este colegio siguen utilizando aulas prefabricadas para desarrollar sus clases. Lo más preocupante es que en menos de 48 horas se han registrado dos robos.
Aprovechando que estos módulos se encuentran protegidos solo por paredes de palos y triplay, delincuentes han podido ingresar con facilidad para apoderarse de materiales educativos y deportivos, útiles de escritorio y productos para la limpieza.
Lo que más ha causado la indignación de la comunidad educativa es el robo de dos tanques de Rotoplas, donde se almacenaba el agua que era usada por los alumnos, teniendo en cuenta que en el lugar no existe este servicio básico.
Por esta razón, hoy no se realizaron clases en esta institución educativa.
“Acá no tenemos red de agua potable y hemos suspendido las clases por fuerza mayor. Tenemos 500 alumnos cuya salud se encontraba en riesgo”, indicó la directora.
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Finalmente, Rosales Vargas mencionó que han solicitado a la UGEL Santa y la Municipalidad de Nuevo Chimbote apoyo con la contratación de un vigilante debido a los diversos robos que han sufrido.