Un multitudinario adiós a las hermanas Marcelina, Carmen y Diane Ochoa Cahuana y de sus pequeñas hijas Anyeline y Luana; le dieron sus familiares hoy en el cementerio de Huicho Cruz del distrito de Chilca en la provincia de Huancayo. Las mujeres murieron el pasado domingo producto de una masacre perpetrada por rezagos del terrorismo en Vizcatán del Ene en la provincia de Satipo, en la región Junín.
Los cuerpos salieron de la vivienda ubicada en el sector de Chilca Alta, rumbo el cementerio de Huicho cruz, los ataúdes iban en hombros de sus familiares que protagonizaban sentidas escenas de dolor. Un vehículo funerario trasladó los cuerpos hasta el camposanto y una vez allí se realizó una ceremonia.
Alejandra Cahuana, madre y abuela de las víctimas, se despidió de sus seres querido, lo mismo hizo el padre de Luana, cuyo llanto no se detenía y no encontraba resignación ante la pérdida de su esposa e hija de solo 4 años.
El hijo de Marcelina, un menor de 16 años, lloró ante el cajón de su madre prometiéndole que sería un profesional como ella soñaba. Finalmente las tres hermanas fueron enterradas juntas y las niñas en otro pabellón.