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Luego de dos años sin poder trabajar, ayer las comerciantes de comida de la feria Grau, volvieron a abrir sus puestos y sirvieron sustanciosos caldos de cabeza, cordero, el mondongo a decenas de comensales que se dieron cita en el reinicio de su actividad económica. La concurrencia de la población fue masiva.
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“Yo cocino hace muchos años, este mondongo se prepara de un día para otro, se pone a las 7 de la noche y ya está a las 2 de la mañana, hoy hemos preparado caldo de cabeza con mondongo y el domingo voy hacer caldo de cordero de Pachacayo para todos mis caseros”, dijo Esther Orellana o conocida de cariño como mamá Techy, que estaba contenta por volver a trabajar.
Por su parte, Rosalía Castro, también se amaneció para traer el pan caliente de Chupaca, aquel que se busca para comer con lechón.
“Me amanecí preparando mi mercadería, no podía dormir al saber que íbamos a volver a la feria, hemos sufrido dos años, porque no teníamos trabajo, pero ahora estamos felices, porque han vuelto nuestros caseros y con nuestro trabajo ya tenemos para llevar un pan a nuestra casas”, acotó Rosalía Castro.
En total son 55 comerciantes del rubro de comidas de la feria Grau que reactivan su economía bajo estrictos protocolos de bioseguridad y con sus respectivas dosis de vacunas.
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El rubro de comida funciona entre jirón Antonio Lobato y Sebastián Lorente, allí expenden el mondongo, caldo de cabeza, cordero, lechón, platos a base de cuy, panes, pescado frito entre otros.
El alcalde de El Tambo, Carlo Curisinche invocó a las comerciantes a mantener la salubridad en la preparación de los alimentos. Destacó que la feria permite la generación de empleo independiente y dinamizar la economía de las familias afectadas por la crisis.
