Dolor en cementerios por fallecidos del terremoto de Pisco

El domingo 15 de agosto, cientos de personas en la región Ica recordaron la perdida de algún ser querido en el terremoto del año 2007.

Trágica noche

Uno de ellos fue Esteban Santacruz Bonilla, morador del distrito de Pachacútec, este hombre con discapacidad y cerrajero de oficio, nos contó que aquella noche del 15 de agosto minutos antes del sismo estaba de retorno a su vivienda, cuando el fuerte terremoto lo sorprendió en el vehículo que regresaba desde el centro de la cuidad de Ica, durante el movimiento intentó salir del auto, pero la fuerza del sismo se lo impidió. En su casa su esposa se encontraba con sus dos hijas, una de ellas en brazos, al intentar evacuar las paredes de su humilde vivienda colapsaron quedando atrapada con la menor.

La escena fue desgarradora cuando Esteban llegó a su inmueble vio a sus vecinos mover los escombros en busca de la mujer y la menor de tan solo un año de edad, luego de varios minutos, lograron rescatarlas siendo llevadas al hospital Regional, lamentablemente la niña no aguantó y perdió la vida en el camino. “Hoy mi hija María hubiese cumplido 15 años, me imagino celebrando su fiesta de quinceaños, siempre voy al cementerio de general de Pachacútec para orar por ella y por mi esposa e hija que sobrevivieron a este terrible desastre”, manifestó el humilde cerrajero.

Alerta temprana

Los continuos registros de sismos en la región Ica mantienen alerta a toda la población, quienes recuerdan con angustia y temor los hechos ocurridos el 15 de agosto del 2007, cuando un terremoto de 7.9 en la escala de Richter sacudió por casi tres minutos el suelo dejando más de 500 personas fallecidas solo en Ica, la provincia de Pisco (epicentro) en completo colapso y, la continua pregunta, ¿estamos preparados para otro terremoto? En palabras del gerente regional de Gestión del Riegos de Desastres, César Guillén Vásquez, se ha mejorado mucho luego del desastre del año 2007, anunciando que en los próximos meses se instalaran sensores sísmicos a lo largo de la costa de la región Ica, siendo los pilotos ubicados en los distritos de Santiago (Ica) y Tambo de Mora (Chincha).

Este sistema permitirá brindar una alerta con 30 segundos de anticipación ante un sismo de gran magnitud.

Labor preventiva

Luego de ocurrido el desastre en la región Ica, el Instituto Nacional de Defensa Civil (Indeci) realizó modificaciones en cuanto a sus competencias funcionales, cambio de tener una labor solo reactiva, a ser preventiva, correctiva y reactiva. “El marco normativo ha cambiado, luego del último gran sismo registrado en suelo peruano (Pisco), el presupuesto se ha incrementado pudiendo implementar sistemas de comunicación con todos los municipios provinciales y distritales.

De esta manera evaluamos de forma inmediata los daños y se determina qué medida tomar en caso hubiera víctimas o daños materiales. La instalación de los sensores sísmicos será de gran utilidad para la población, que debe tener preparado un plan familiar en caso de sismos o cualquier emergencia”, declaró para Correo Guillén Vásquez.

Según el Censo Nacional de Vivienda realizado por el Instituto Nacional de Estadística e Informática en el año 2007, había en aquel entonces 8397 viviendas abandonadas a consecuencia de los daños ocasionados por el movimiento telúrico.

Monumentos

Dos edificaciones eclesiásticas ubicadas en el centro de Ica, recuerdan a toda aquel que pasa sus frontis, la fuerza del sismo. Las iglesias la Catedral y San José hasta la fecha no pueden ser reconstruidas, el motivo es la falta del título de propiedad para iniciar los trámites ante el Ministerio de Cultura.

Fuentes de este medio indicaron que la alcaldesa de Ica, Emma Mejía Venegas, ha sostenido reuniones con el presidente del Cofopri para buscar la titulación de ambos templos, mientras esto ocurre la población debe mantener distanciamiento y cuidado al transitar por ambas estructuras que pueden colapsar en cualquier momento.

“No puede ser posible que por esperar las autorizaciones del sector Cultura, tengamos que esperar entre 7 y 8 meses, para poder ejecutar los proyectos, mientras tanto el tiempo pasa y el presupuesto se pierde y después nos tildan de incapaces, las normas tienen que cambiar”, indicó Javier Gallegos Barrientos, gobernador regional de Ica.

Zonas vulnerables

Luego del terremoto del 2007, la expansión de las zonas urbanas fue en aumento, sin embargo, la falta de un Plan de Desarrollo Urbanístico hizo que no se respetara las normas técnicas de construcción en zonas vulnerables poniendo en riesgo nuevamente a la población ante un eventual terremoto.

“La Tierra Prometida, Pueblo Joven Señor de Luren, Fonavi, Hilda Salas y Los Pollitos, son las zonas más vulnerables por la consistencia del suelo ante un sismo, el suelo es arenoso y se debe esperar los estudios de suelo que realicen en el Plan de Desarrollo Urbanístico para establecer los parámetros para la edificación de viviendas, hasta cuantos pisos puede estar permitido construir, es más económico prevenir que reconstruir”, declaró Rolando Mendoza Corzo, jefe Defensa Civil Provincial.