Según cifras del Minsa, este grupo etario es el que menos avance presenta en el proceso de inmunización en toda la región. Algunos no asisten a los vacunatorios por desconocimiento o ignorancia. Para especialista, falta educación.
Según cifras del Minsa, este grupo etario es el que menos avance presenta en el proceso de inmunización en toda la región. Algunos no asisten a los vacunatorios por desconocimiento o ignorancia. Para especialista, falta educación.

Carlos tiene 20 años y dice que no se inyecta la segunda dosis de la vacuna contra la porque la primera le dolió. “Hasta ahora me molesta el brazo [izquierdo]”, agrega.

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Sofía, también trujillana, asegura que hasta la fecha no se inocula porque le han dicho que la vacuna tiene un chip. A sus 26 años, inyectarse la primera dosis no es su prioridad, reafirma.

Cifras

Si bien La Libertad es una de las regiones que más ha avanzado en el proceso de inmunización contra el SARS-CoV-2 en todo el país, parece que convencer a los adultos jóvenes a que se vacunen será uno de los principales retos que tendrán las autoridades sanitarias para llegar al 100% de su población objetivo inoculada.

Según el Repositorio Único Nacional de Información en Salud (Reunis), los jóvenes entre 17 y 29 años de edad son los que menos han acudido a los vacunatorios de la región, aun cuando su grupo etario es bastante inferior al de las personas de 30 a 59 años (763,454).

Hasta el cierre de esta edición, de los 445,597 jóvenes de 17 a 29 años que deben recibir las dos dosis en La Libertad, se han inyectado la primera 386,214 (86.7%) y la segunda, 339.222 (76.1%). Es decir, 59,356 caminan por las calles sin ninguna vacuna, expuestos a contraer la enfermedad y a que su estado de salud posiblemente sea más grave si es que se infectan.

De este grupo, el que menos avance presenta es el de 17 a 19 años. De los 102,242 que deben inocularse, han recibido la primera dosis 87,534 (85.6%) y la segunda, 74,655 (73%).

Además, de toda la meta de este grupo etario con las dos dosis, la provincia y el distrito que menos avance presentan son Bolívar (59.7%) y Sayapullo (44%), ambos ubicados en la sierra de la región.

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Virú, cuyo alcalde, Andrés Chávez Gonzáles, dijo semanas atrás que el proceso de vacunación en su jurisdicción no se aceleraba por “ignorancia” de la población, ha avanzado un 73%, pues de los 25,061 jóvenes de 17 a 29 años que deberían estar inmunizados con las dos dosis, 6,779 no han retornado a un vacunatorio.

Como sucede con el grupo etario de 30 a 59 años, compuesto por 763,454 personas, la diferencia en el avance del proceso de inmunización entre jóvenes y adultos de 60 años a más también es distante.

El Reunis precisa que este último grupo tiene un avance de 89,6% con la primera dosis y 86.9% con la segunda.

El epidemiólogo Miguel Ángel Tresierra Ayala asegura que también es muy importante vacunar a los adultos jóvenes para evitar más contagios de Covid-19. Sin embargo, lamenta que muchos jóvenes no se interesen en su salud. “Eso es educación”, enfatiza.

Días atrás, el infectólogo David Lucano Santa Cruz sostuvo que es muy importante que la población tome conciencia de la tercera ola que enfrenta el país.

Añadió que si bien pocos pacientes con coronavirus llegan a hospitalizarse porque presentan cuadros leves o moderados, hay a quienes la enfermedad se les complica porque precisamente no cuentan con la vacuna. “El virus se contagia vía aérea, y dado que la variante ómicron es mucho más transitable, las posibilidades de contagio son mayores”, dijo el también docente de la Universidad César Vallejo.

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Otra vista

José Cabrejo Paredes, especialista en medicina familiar y comunitaria, tiene una lectura distinta.

Para el galeno, también es importante que los jóvenes se vacunen y completen hasta su dosis de refuerzo. No obstante, sostiene que deberíamos fijarnos más en los factores de riesgo que tiene una persona y no en la edad.

“Si yo tengo un niño asmático, ¿lo vacuno o no lo vacuno? Por supuesto que sí. Pero si tengo un niño sano, con buena alimentación y que no sale de casa, puedo posponer esa vacunación”, explica.

“El incrementar el porcentaje de vacunados no va a disminuir el riesgo de muerte. El incrementar el porcentaje de personas de riesgo [o comorbilidad] vacunadas, sí podría disminuir el riesgo de muerte”, añade.

En esa línea, el especialista sostiene que es más preocupante aún que de los 262,692 adultos mayores de 60 años a más que residen en La Libertad, 27,320 (10.4%) todavía no hayan recibido ninguna de las dos dosis.

“Si son las personas de mayor edad y las que tienen alguna comorbilidad las que se complican con el virus, entonces, ¿dónde tenemos que cerrar la brecha al 100%? En estas personas. Para mí es grave que pase esto. Todos los adultos mayores ya deberían estar con sus dos dosis y hasta con la de refuerzo”, manifiesta.

Cabrejo enfatiza que la vacuna no impide que una persona contraiga el virus por primera, segunda o más veces.

“Lo que también puedo decir es que así lleguemos al 100% de las personas inmunizadas, esta vacuna no va a producir inmunidad de rebaño, pues no impide que nos infectemos y cada cinco o seis meses desaparecen las defensas y vamos a tener que volver a vacunarnos”, afirma.

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Proceso

Hasta el cierre de esta edición, el Reunis informó que ayer se inmunizaron 9,053 personas en la región.

De estas, solo 691 se inyectaron la primera dosis, 2,037 se inocularon por segunda vez y 6,325 se pusieron la vacuna de refuerzo.

En total, 1,500,001 ya tienen la primera vacuna; 1,360,664, la segunda; y 344,874 la tercera.

Ascope continúa siendo la provincia liberteña con un porcentaje mayor de vacunados con las dos dosis (85.3%), seguida de Pacasmayo (83.5%) y Trujillo (82.9%), en el segundo y tercer lugar, respectivamente.

Luego se ubican: Chepén (78.8%), Virú (75.9%), Julcán (74%), Santiago de Chuco (73.8%), Gran Chimú (72.4%), Otuzco (71.4%), Pataz (70.6%), Sánchez Carrión (68.3%) y Bolívar (64.1%).