Pese a estar ubicada en el centro histórico, frente a la Plaza de Armas de la ciudad, la Catedral de Trujillo sufrió el robo de algunos de los adornos de bronce (aldabas) que se encontraban en las puertas de ingreso y salida al templo por el jirón Orbegoso.
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En la madrugada
De acuerdo con las primeras investigaciones, los malhechores habrían perpetrado el robo de las aldabas durante la madrugada de ayer. Para cometer su fechoría, se dieron tiempo incluso de saltar las rejas de madera que se ubican alrededor de toda la iglesia.
Agentes de la comisaría de Ayacucho llegaron en la mañana a la Catedral para tomar huellas y poder identificar a los criminales. En la puerta principal, se observó que los delincuentes sustrajeron una de las aldabas e intentaron roba otra, pero al parecer no pudieron hacerlo por falta de tiempo.
Sin embargo, se observó que en una de las puertas de la parte lateral derecha del templo sí pudieron sustraer uno de los adornos de bronce ubicado en la parte alta.
Abrió puertas
Pese al robo, la Catedral de Trujillo no cerró sus puertas ayer y durante las investigaciones que hacía la Policía se observó a una importante cantidad de feligreses orando dentro de la misma. Algunos de ellos, tras enterarse de lo ocurrido, calificaron el mismo como un atentado contra la religiosidad y la cultura.