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A pesar de varios intentos, los gremios del servicio de taxi no consiguen una reunión con la alcaldesa de Chiclayo, Janet Cubas Carranza.
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El presidente de la Coordinadora Regional del Transporte Público, Wilson Miñope Carbajal, dijo que esta semana volverán a presentar un oficio al despacho de alcaldía, a fin de lograr un encuentro.
“Desde antes que juramente al cargo pedimos dialogar con la alcaldesa, y hasta ahora no somos atendidos”, informó el dirigente.
También reconoció que otro motivo de malestar entre los choferes es que todavía no se define quiénes serán los gerentes y subgerentes de Desarrollo Vial, Transportes y Tránsito de la Municipalidad Provincial de Chiclayo (MPCH).
Por ahora, la gerencia de Transportes del municipio ha sido encargada al abogado Ulises Montenegro Fernández, quien es trabajador de planta.
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Pendiente
La Coordinadora Regional de Transporte Público exige que la comuna provincial disponga una formalización extraordinaria para más de 30 mil unidades (taxis, colectivos y camionetas rurales).
El grueso de esos vehículos está conformado por 17 mil taxis.
“También necesitamos la autorización definitiva para los paraderos . En el proceso de formalización está pendiente la entrega de documentos y que forme la Comisión Consultiva. Ojalá abran el diálogo con el transporte”, afirmó Miñope.
Debido a que el nivel de informalidad es muy alto en la región, los taxistas insisten en que el municipio les otorgue los permisos, tal como se realizó el año pasado en la ciudad de Piura, para apoyar a este sector de trabajadores que se vio golpeado por la pandemia por Covid-19.
De otro lado, la falta de un gerente designado por la alcaldía de Chiclayo, impide que se ejecuten disposiciones para dinamizar dicho servicio.
El reclamo de los gremios también incluye las fallas en la Subgerencia de Tránsito porque no existe una adecuada señalización.
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De acuerdo a los taxistas, la gestión pasada estableció zonas rígidas sin criterio técnico y sin un estudio de impacto vial.
En el ámbito del transporte público, la MPCH tiene varias tareas pendientes para ordenar, al menos, el centro de la capital de la amistad.
Los conductores esperan que se implementen más paraderos formales, estacionamientos y un adecuado sistema de fiscalización en las áreas pintadas de amarillo.
Además, los gremios solicitan la ejecución de la obra del terrapuerto para que las empresas de transporte interprovincial se trasladen a esa zona; el parchado de las pistas y reparar el hundimiento en vías de alto tránsito.
También la reubicación de los vehículos de carga pesada que pasan por la calle Jorge Chávez, porque estas unidades son fiscalizadas por el Ministerio de Transportes y Comunicaciones, cuya circulación reduce la vida útil del asfalto.
