Desde hace una semana vecinos soportan aniegos de aguas pluviales y residuales frente a sus viviendas. Transportistas optan por guardar sus unidades ante los riesgos.
Desde hace una semana vecinos soportan aniegos de aguas pluviales y residuales frente a sus viviendas. Transportistas optan por guardar sus unidades ante los riesgos.

Miles de familias de varios pueblos jóvenes y urbanizaciones de los distritos de , y La Victoria soportan, desde hace una semana, los aniegos de aguas pestilentes frente a sus viviendas.

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Las calles quedaron inundadas no solo con el agua de lluvia, sino también con aguas residuales producto del colapso de las redes de alcantarillado; por lo que la población exige una pronta solución a las autoridades.

Problema

Al respecto, la Entidad Prestadora de Servicios de Saneamiento de Lambayeque (Epsel) informó que el represamiento de aguas servidas en diferentes zonas de Chiclayo se originó debido al hundimiento de un colector de 42 pulgadas.

Esto afectó principalmente las calles del centro de Chiclayo, la avenida Salaverry, las urbanizaciones Próceres, Caja de Depósitos, Los Mochicas, Remigio Silva, Satélite, Bancarios, Santa Elena, José Olaya y los pueblos jóvenes José Olaya y 09 de Octubre.

“Nuestro personal técnico, en coordinación con el gobierno regional, están desarrollando las acciones correspondiente que permitan su reparación. Con equipos de bombeo se viene efectuando el bypass, de buzón a buzón, con el fin de bajar los niveles de las aguas residuales”, indicó.

En respuesta, la Municipalidad Provincial de Chiclayo (MPCh) informó que en dichas zonas realizó grandes esfuerzos conjuntamente con los vecinos para retirar las aguas pluviales, pero nuevamente se han visto perjudicadas por las aguas residuales.

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“Por ello exhortamos la rápida acción de Epsel para superar este grave problema de saneamiento. Reiteramos nuestra firme voluntad de continuar articulando esfuerzos en bienestar de la ciudadanía”, informó la MPCh.

Sobre el particular, el dirigente de la Coordinadora Regional de Transporte Público de Lambayeque, Wilson Miñope Carbajal, señaló que los transportistas son los más afectados con los grandes charcos en la ciudad.

“Un gran porcentaje de transportistas ha optado por guardar sus unidades porque los pocos que han estado trabajando ahora están en los talleres. La ciudad resulta imposible de transitar, todo es agua de desagüe en las vías, todavía hay grandes charcos con huecos que malogran las unidades”, aseveró.

Lo que es peor, el dirigente advirtió que el precio del GLP aumento de 9 a 10 soles perjudicando a los transportistas.