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En diversas formas y de manera trágica dos personas perdieron la vida en la región Lambayeque.
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Uno de ellos fue el empresario, Jorge Luis Suyón Correa, de 44 años de edad, dedicado al rubro de servicios logísticos, a quien de manera accidental una pesada estructura de una de sus montacargas le cayó sobre su cabeza, en plena faena.
Accidente
Este lamentable accidente se registró la noche del último sábado, cuando la víctima natural de Olmos, se encontraba descargando unos tablones de madera en la biblioteca de la Municipalidad Distrital de Puerto Eten, ubicada en la calle San Martín.
Al parecer, todo estaba bien, pero al culminar sus labores, colocó la montacarga al costado de un camión donde estaban algunas de las tablas. En ese momento, Suyon Correa pretendió cerrar las puertas de la tolva, pero desafortunadamente la grúa horquilla del montacarga se desprendió y golpeó violentamente el cráneo del empresario.
En ese momento quedó tendido en el suelo gravemente herido emanando bastante sangre. Los trabajadores que estaban junto a él, rápidamente solicitaron apoyo de la Policía de la comisaría de la zona, cuyos agentes al llegar lo condujeron hasta el centro de salud de Monsefú.
El médico de turno nada pudo hacer para auxiliarlo, pues lastimosamente ya estaba cadáver.
Horas después llegaron los familiares y protagonizaron dramáticas escenas, ya que no podían creer que su ser querido había muerto.
Todos lo recordaban como un buen hombre, honesto y muy trabajador para sacar adelante a su familia.
Un representante del Ministerio Público ordenó que el cuerpo inerte sea internado en la morgue de Chiclayo, para que se le practique la respectiva necropsia de ley.
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Tragedia
Por otro lado en el distrito de José Leonardo Ortiz, un obrero falleció, luego que presuntamente cayera de cabeza por unas escaleras.
A las 9 de la mañana, la recepcionista de iniciales A.L.N.D. (17) llamó a la comisaría de la localidad, para informar que en el interior de una habitación del hospedaje ¨Villa Las Américas¨,ubicado en la avenida América N° 629, se hallaba un huésped muerto.
Asimismo, indicó que se trataba de Cesar Sandro Ortiz López (40) y junto a él estaba durmiendo su mamá Olga López Tapia (91), quien se encontraba delicada de salud.
Los uniformados de inmediato se constituyeron hasta el lugar y efectivamente verificaron que su anciana madre dormía junto al occiso que ya estaba en estado de putrefacción.
La empleada adolescente indicó a los efectivos del orden que ambos se hospedaron hace algunos días, pero Ortiz López tomaba bastantes bebidas alcohólicas y además padecía de epilepsia.
Por lo tanto, el último 6 de mayo del presente año, cuando bajaba por las escaleras resbaló y rodó hasta pegarse fuerte en la cabeza.
Empezó a sangrar, pero aun así logró ponerse de pie. La menor aseguró que junto a otros trabajadores procedieron a curarle la herida y al intentar trasladarlo a un hospital, el individuo se negó a ir. Solo ingresó a su dormitorio junto a la mujer que lo trajo al mundo y se encerraron supuestamente a descansar.
Finalmente declaró que se percató del finado, tras el fuerte olor a nauseabundo que salía del cuarto.
Al abrir la puerta con una copia de la llave se llevó una ingrata sorpresa. Wilmer Imoñan López (60), añadió que su primo también tenía problemas de drogas.
