Una presunta organización criminal denominada “Los Piaras de Huacariz” e integrada por servidores del Instituto Nacional Penitenciario (INPE) fue desarticulada por el Ministerio Público y la Policía.
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De manera simultánea un megaoperativo se realizó ayer en horas de la madrugada, tanto en Cajamarca, Chiclayo, Trujillo y Yurimaguas, que permitió la captura de 12 agentes del INPE investigados por el presunto delito contra la administración pública en su modalidad de cohecho pasivo propio.
Operativo
Esta medida se dio luego que la Fiscalía Especializada Contra la Criminalidad Organizada de Cajamarca solicitara ante el Séptimo Juzgado de Investigación Preparatoria Especializado en Delitos de Corrupción de Funcionarios, un requerimiento de detención preliminar para 21 personas acusadas de extorsionar a los presos con el cobro de dádivas a cambio de brindar beneficios penitenciarios.
Es así que, con el apoyo de agentes policiales y 26 fiscales más, tras obtener órdenes de descerraje y allanamiento acudieron a diversas viviendas que estaban en la mira.
En la Capital de la Amistad llegaron hasta las casas ubicadas en la avenida San Martín N° 191 y en la manzana 9 interior A del distrito de Pomalca, de propiedad de Luis Alberto Álvarez Rojas y César Augusto Barco Amay, respectivamente.
Asimismo, al domicilio situado en el block N° 1615 donde reside Alejandro Zapata Callirgos, en el distrito de Tumán.
De igual manera en los predios de la calle España N° 444 en el distrito de José Leonardo Ortiz donde vive Luis Enrique Vásquez Becerra y en la avenida El Triunfo N° 994 en el pueblo joven Cruz de La Esperanza de Chiclayo, de Heber Alonso Santos Cano.
Tras estos allanamientos, las autoridades solo lograron arrestar a Santos Cano y Barco Amay, mientras que el resto de implicados no se encontraban en los inmuebles. No se descarta que se haya filtrado información del operativo y hayan fugado.
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Más detenidos
De la misma forma se detuvo en las regiones de Cajamarca, La Libertad y Loreto a Hugo Lalopú Sernaqué, José Edgar Burgos Bobadilla, Dany Richard Lluncor Castillo, Benigno Martín Cisneros Vallejos, Danilo Avelino Quispe Sánchez, Aderlin Taylor Muñoz Baltodano, Cesar Augusto Carrasco Montoya, Carmen Esther Guzmán Torres, José Palomino Cruz y Henry Frank Bernabé Oliveros. Ellos se desempeñaban como personal de seguridad y alcaides del INPE.
Según el expediente 01507-2021-1-0601-JR-PE-01, a los servidores del INPE se imputa que operarían desde el 2015 hasta la actualidad teniendo como cabecilla a Edwin Frank Ortiz Marreros, quien se valía de los distintos cargos que ostentaba al interior del penal de Huacariz, en Cajamarca.
La mafia supuestamente exigía cobros a los reos del recinto carcelario para beneficiarlos con la venta de drogas. También ingresaban al penal celulares, chips, cargadores, USB, entre otros accesorios prohibidos.
Todo indica que los equipos de comunicación eran utilizados tanto para extorsionar a empresarios, transportistas u otros en varios departamentos del país, así como para estafar bajo la modalidad de “Fábrica de Sueños”, “Telepromo” u otros en agravio de ciudadanos que caían en el accionar delictivo.
Los internos también pagaban por bebidas alcohólicas y servicios básicos dentro del establecimiento.
Cabe indicar que algunos de los agentes INPE que aparecen en esta presunta red criminal fueron capturados, años atrás, cuando pretendían pasar objetos prohibidos como teléfonos celulares, chip y hasta drogas a la cárcel de Cajamarca, pero les dieron libertad.
Correo buscó la versión de las autoridades penitenciarias del INPE en la oficina zonal norte, pero no hubo respuesta y había hermetismo por las detenciones del personal INPE.