La vicegobernadora regional de Lambayeque, Flérida Flor Saavedra López, consiguió que la Prefectura Regional le otorgue garantías para su seguridad, ya que teme por su vida.
Este trámite se enmarca en las denuncias que dicha autoridad formuló por presunta violencia psicológica en contra del gobernador regional, Jorge Pérez Flores, y del gerente general del GORE, Ranjiro Nakano Osores.
Saavedra señala que en las últimas semanas, cuando estuvo a cargo del despacho del gobernador regional, fue víctima de un trato verbal totalmente fuera de lugar por parte de Nakano y de actitudes discriminatorias por parte de Pérez y de sus funcionarios de confianza, a pesar de que ella fue electa por voto popular en los comicios del 2022.
También explicó que estos maltratos responderían a que ella buscó sacar a Nakano de la gestión, pues este no cumpliría las metas de ejecución presupuestal, ya que el GORE Lambayeque solo alcanza el 32 % en cuanto a inversión para obras.
Además, se han presentado distintas denuncias por irregularidades en la gestión y ninguna sería adecuadamente investigada, a fin de proteger los recursos públicos.
Por otro lado, indicó a la prensa que se mantiene firme en su labor en la entidad y que seguirá esforzándose para transparentar la gestión regional.
A raíz de las denuncias por violencia, está pendiente que la Fiscalía Penal investigue los hechos y que se dicten medidas de protección para que la agraviada no sea contactada por ninguno de los denunciados.
Hechos narrados en la comisaría
Según la denuncia policial, la agraviada se desvaneció tras sostener una discusión con el titular de la entidad; pues este se habría negado a atenderla.
A las 6:30 de la tarde del último jueves, Saavedra acudió a la Comisaría de la Familia para denunciar que el pasado 25 de marzo, en circunstancias que visitó el despacho del funcionario para solicitar una reunión, él le negó el acceso.
En su denuncia la agraviada sostiene que Pérez envió al gerente general del GORE, Ranjiro Nakano, para recalcarle que no podía atenderla porque debía conversar con él un tema urgente.
Asimismo, Saavedra respondió que le parecía injusto su trato y que no era la primera vez que la ignora y no le da el valor como mujer.
La vicegobernadora rompió en llanto y solo atinó a decirle que recuerde que ambos iniciaron de cero juntos y que, a pesar de ello, solo recibía indiferencia y discriminación.
Esto no le habría importado al gobernador, pues - según Saavedra - también les ordenó a su asesora y a sus otros trabajadores que le prohibieran el ingreso a su oficina.
“Me respondió que estaba muy preocupado y que no tenía tiempo de atenderme porque lo estaban persiguiendo para hacerle algo. Que sea breve, que él no tenía tiempo”, dijo ante la Policía.
En la denuncia también señala que Ranjiro Nakano cuestionó su presencia en el despacho, para luego ofrecerle su ayuda. No obstante, ella respondió que no iba a mendigar nada y solo requería de respeto.
Durante el altercado, la vicegobernadora sufrió una descompensación, siendo atendida por trabajadores de la entidad regional, quienes le ofrecieron un vaso de agua.
Tras recuperar el equilibrio. Saavedra precisó ante Pérez: “Tú no me quieres aquí. No sé por qué tuve que venir a verte. Había pensado conversar contigo para llegar a un entendimiento pero veo que es imposible (...). Lo que estás haciendo conmigo es algo inhumano, como si no tuvieras una madre e hijas porque ellas también son mujeres”.
Posterior a la discusión, la agraviada solo se retiró del GORE envuelta en llanto.
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