La crisis en el transporte público y la seguridad ciudadana en Lima Norte, especialmente en el distrito de Ancón, ha alcanzado niveles alarmantes.

Los constantes ataques y extorsiones dirigidos a las empresas de transporte formal han puesto en jaque la movilidad de los ciudadanos y generado un clima de zozobra en la población.

El alcalde de Ancón, Samuel Daza, ha expresado su profunda preocupación ante esta situación y ha denunciado la inacción del Ejecutivo. Según el funcionario, la falta de medidas concretas por parte del Ministerio del Interior está dejando a los habitantes de Ancón y de otros distritos de Lima Norte a merced de la delincuencia.

Daza ha enfatizado que la cercanía de dos penales a su jurisdicción ha convertido a Ancón en un blanco fácil para los delincuentes, quienes estarían planificando los ataques desde estos centros penitenciarios. Ante esta grave amenaza, el alcalde ha solicitado al Gobierno declarar el estado de emergencia en su distrito.

Además de la declaración de estado de emergencia, el alcalde ha solicitado la construcción de una nueva comisaría para hacer frente al creciente volumen de denuncias por delitos.

A pesar de los anuncios de la Policía Nacional sobre el refuerzo de los operativos en Lima Norte, Daza aseguró que en Ancón no se han visto resultados tangibles.

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