Cada bebida recomendada refleja la rica herencia cultural, evocando recuerdos y emociones profundas.
Cada bebida recomendada refleja la rica herencia cultural, evocando recuerdos y emociones profundas.

A medida que se acerca el Día de la Canción Criolla, la celebración de la rica herencia cultural del Perú se manifiesta no sólo a través de la música, sino también en sus sabores únicos. Este 31 de octubre, la fusión de la tradición criolla con la coctelería peruana se convierte en una experiencia sensorial imperdible.

Hoy más que nunca, las bebidas emblemáticas del país se alzan como protagonistas, reflejando la misma pasión y tradición que caracteriza a la música criolla. “Se ha fomentado un mayor sentido de peruanidad, con un uso creciente de destilados nacionales de alta calidad, como el pisco, las papas nativas y el maíz morado. Debemos sentirnos orgullosos de la riqueza y diversidad de nuestros insumos, que se celebran en nuestras fiestas culturales, donde la gastronomía y la música se entrelazan. Al brindar con estas bebidas, disfrutamos de sabores únicos y rendimos homenaje a la herencia que nos une como peruanos”, expresó Carlos Neira, docente de la Facultad de Gastronomía y Hotelería de la Universidad Peruana de Ciencias Aplicadas (UPC).

Es por ello y con el objetivo de visibilizar mucho más nuestra riqueza gastronómica, el especialista ofrece un paso a paso para preparar tres cócteles esenciales con los que se podrá celebrar a lo grande esta festividad:

Salud compadre

Un clásico que combina la frescura del pisco con el ginger ale, y perfecto para alegrar las celebraciones, simbolizando el espíritu festivo de la jarana criolla.

Para preparar esta bebida, necesitarás los siguientes ingredientes: pisco acholado, ginger ale, una rodaja de lima o naranja, y hielo mediano y compacto. Comienza llenando un vaso largo con hielo hasta el borde. Luego, añade 60 ml de pisco acholado de tu preferencia (mis recomendaciones son Don Reynaldo o Viñas de Oro) y completa con ginger ale hasta casi llenar el vaso. Para finalizar, decora con una rodaja de lima o naranja en forma de medialuna. ¡Ahora tu bebida está lista para disfrutar!

Callejón de un solo caño

Whiskey combinado con Coca-Cola y una rodaja de naranja, ideal para refrescarse y animarse a salir a bailar.

Para este segundo cóctel, necesitarás los siguientes ingredientes: Don Michael Black Whiskey, Coca-Cola en botella de vidrio, hielos medianos y compactos y una naranjas. Comienza llenando un vaso largo tipo “long drink” con hielo hasta el borde. Luego, vierte 60 ml del exclusivo Don Michael Black Whiskey, elaborado con maíz morado. Completa el vaso con Coca-Cola. Para darle un toque especial, perfuma el cóctel con los aceites naturales de la piel de naranja. ¡Y listo! Un cóctel preparado para el deleite.

No hay primera sin segunda

Elaborado idealmente con vodka de papas nativas, este cóctel refrescante es perfecto para acompañar los valses criollos.

Para preparar este último cóctel, necesitarás los siguientes ingredientes: Vodka 14 Inkas, agua tónica, hielo grande y compacto, y flores comestibles. Comienza colocando abundante hielo en una copa de vino. Luego, añade 60 ml de Vodka 14 Inkas y completa con una lata de agua tónica. Para darle un toque especial, decora el cóctel con una flor comestible en la parte superior y estará lista para sorprender tus sentidos.

Estos cócteles son reinterpretaciones de clásicos que han perdurado a lo largo del tiempo, lo que resalta el valor de lo atemporal. “Por ejemplo, el Chilcano es y seguirá siendo uno de los favoritos en peñas y fiestas. El whiskey con cola, conocido como Jack & Coke, es un clásico en los bares más concurridos de EE. UU., pero en nuestra versión lo elaboramos con whiskey de maíz morado cajamarquino. Finalmente, el Vodka Tonic se mantiene popular por su frescura, ideal para esos momentos de canto y baile en el criollismo, donde siempre hace falta gente fresca y con energía”, concluye Neira.