El vino tradicional es una bebida obtenida de la uva que gracias a la fermentación y otros procesos podemos degustar. Sin embargo, en una campiña de la Cordillera Blanca en Caraz, en la región Ancash, se cultivan los mejores berries peruanos con los que se prepara uno de los primeros vinos frutados de nuestro país.
Se trata de la marca Morandina la que ha abierto una nueva categoría en el mundo de la enología peruana, pues se trata de un producto dentro de la categoría de “vino de frutas, que no procede de ninguna variedad de vid”, sino de los berries cultivados en las alturas de Caraz.
Fue gracias a la inquietud y el deseo innovador del ingeniero agrónomo Manuel Bobadilla, que se creó esta exótica bebida con los berries, cuyo contenido tiene múltiples beneficios como su contenido de vitaminas y minerales, tiene un sabor único y ya goza de popularidad en este país.
Este vino frutado es a base de arándanos, zarzamoras, aguaymantos y frambuesas que luego son vinificados y embotellados cuidadosamente en pequeñas producciones en su lugar de origen.
Parte de su cualidad única es que se desarrolla con el clima de la campiña de Caraz y el riego con deshielos puros de la Cordillera Blanca, que le confieren al vino una buena estructura y una gran concentración aromática, con intensas notas a frutos del bosque en cada una de sus presentaciones.
Preparación
Se necesitan 2 kilos de fruta para obtener una botella de este vino. El proceso empieza con la recolección de los frutos de forma manual, los mismos que son estrujados y fermentados a partir de los azúcares naturales presentes en las frutas, la extracción del color natural del vino se debe a los procesos de remontados que se realizan en esta fase que dura un promedio de 20 días.
Este vino trasegado pasa a la fase de crianza (un año en reposo), una vez cumplido este tiempo, viene la evaluación final, y una vez aprobado, pasa al área de embotellado y etiquetado. Todo este proceso es artesanal, cuidando las normas de asepsia y es guiado por la bióloga Keylita Gavidia Ruiz.
Tipo de vino
Dentro de su gama de vinos han separado las categorías de seco y semi seco, un total de 8 vinos para cada tipo de gusto y maridaje.
Blueberry (Seco): Vino de arándano que más resalta en la categoría de secos, pues la mora azul tiene antioxidantes, se siente bastante el tanito de esta fruta, la sensación es similar a una esencia pura de maíz morado, combinaría bien con carnes rojas, cerdo asado o tarta de arándanos.
Blackberry (Seco y semi-seco): Vino de zarzamora con entrada amable con cuerpo mediano, se perciben aromas a fruta roja y negra jugosa. Combina con carnes a la parrilla y chimichurri o chocolate bitter.
Goldenberry (Seco): Vino exótico de aguaymanto que despierta una mezcla de aromas de miel, limón y otros frutos cítricos. Entra ligero al inicio, pero tiene un amargor final, es un vino para los que les gusta probar cosas nuevas. Maridar con ceviche, Pescado a la menier, y postres cítricos.
Blueberry (Semi Seco): Vino de arándano con entrada amable, dulzor medio que invita otro sorbo, final fresco y moderado, es un producto que le encanta al peruano. Este tipo de vino se disfruta solo en medio de una agradable conversación. Maridar con queso brie con pan de orégano o tarta de chocolate.
Goldenberry (Semi Seco): Vino del aguaymanto con un grado de dulzor extra para los que gustan de algo cítrico, por lo que es mejor disfrutarlo heladito.
Berry L’amour (Semi Seco): Vino de frambuesa color rojo pasión, aromas florales, dulzor suave y moderado con una acidez fresca. Disfrutarlo a 7-9 grados centígrados. Maridaje con comida chifa o un cheesecake de fresas. El preferido para compartir en pareja y enamorarse de nuevo.
Berry Mix (Semi Seco): Es la mezcla perfecta de los tres berries, arándano, zarzamora y frambuesa, muy equilibrado para sentir todos los sabores, los antioxidantes del arándano, el bouquet de la zarzamora con notas de roble francés y el floral de la frambuesa. Se puede combinar con risotto de champiñones y torta selva negra.