“Grata fue la sorpresa en las dos últimas visitas que hicimos a Miami, al ver una gran variedad de conceptos de cocina peruana alcanzar el éxito lejos de casa”, comenta Jimena Agois, periodista y fotógrafa gastronómica
“Grata fue la sorpresa en las dos últimas visitas que hicimos a Miami, al ver una gran variedad de conceptos de cocina peruana alcanzar el éxito lejos de casa”, comenta Jimena Agois, periodista y fotógrafa gastronómica

Visitar otro país y ver cómo la cocina peruana va haciéndose un lugar en el corazón de los comensales de ese lugar es realmente un orgullo. Hemos visto viajar al ceviche y tiradito por muchos países y quedarse, pero grata fue la sorpresa en las dos últimas visitas que hicimos a Miami, al ver una gran variedad de conceptos de cocina peruana alcanzar el éxito lejos de casa. Ya sabíamos que cocineros como Juan Chipoco, dueño de Cvi.Che 105 había logrado el éxito y abierto varios restaurantes de su marca.

Pero no sólo el ceviche es lo que le gusta al latino. Chipoco tiene hoy marcas como Pollos y Jarras, fusión peruano japonesa y Yuca donde lo peruano se une a la cocina cubana, entre otros. Y es así que vemos como nuestra gastronomía se adapta a otros lugares y evoluciona, yendo más allá del ceviche clásico. Continuamos el viaje y confirmamos que la reciente apertura de Osaka Miami ha sido también un éxito rotundo en la ciudad. Siempre rindiendo homenaje a nuestra gastronomía nikkei pero llevando la experiencia un paso más allá, donde se incluye alta coctelería y un local que cada día se pone más de moda. La cocina está a cargo de Rogger Quispe y Juan Urrutia. 

A ellos se unen otros cocineros peruanos, como Diego Oka quien ha logrado hacer de la visita a La Mar Miami una experiencia única. Sobre todo para quienes hemos tenido el placer de probar su menú degustación (y que debería ser una opción en carta, y no sólo servirse en ocasiones especiales) donde se nota la impecable técnica de este joven cocinero y su infinita creatividad y libertad para llevar nuestra cocina a otro nivel.

VARIEDAD. Habíamos probado la cocina de Oka en cenas con otros cocineros, pero no habíamos tenido el placer de hacerlo en su espacio. Peruano, de ascendencia nikkei y de una curiosidad enorme que lo ha llevado a viajar por el mundo, Oka logra un menú que sorprende en cada bocado por el impecable uso de los insumos y su combinación con sabores que van más allá de los tradicionales como el tiradito con una delicada salsa de queso parmesano que es una delicia. O el bocado crujiente con palta y trucha de Arapa Puno.

Otra de las grandes sorpresas del viaje fue Itamae, un espacio ubicado en pleno corazón del Design District tan de moda hoy en día en la ciudad. Nando y Valerie Chang, son hermanos, chiclayanos y aunque tienen ascendencia china, el amor por la cocina japonesa les llega por su padre, quien al momento de migrar a Miami, muchos años antes que sus hijos, aprendió trabajando en un restaurante japonés. Es así que la carta de Itamae combina técnicas japonesas e influencias norteñas, logrando un menú donde hay cuatro versiones de tiraditos, dos de cebiche, y una variedad de makis con personalidad propia y mucho sabor, sorprendiendo no sólo al exigente paladar de los visitantes peruanos, sino también a locales y turistas de todo el mundo. Técnica impecable y mucho sabor, en otro local que logra sorprender a un compatriota en otro país, cosa que no sucede muy a menudo cuando los peruanos decidimos visitar restaurantes fuera. Seguiremos informando ya que sabemos que hay varios lugares con sabor local, próximos a abrir sus puertas.