Caleb Wallace, un organizador de un movimiento en contra del uso de mascarillas en Texas, murió a la edad de 30 años después de contraer COVID-19. En una página de GoFundMe creada para apoyar a la familia de Wallace, su esposa, Jessica Wallace, escribió el sábado que “Caleb había fallecido en paz”.
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“Él vivirá para siempre en nuestros corazones y mentes”, dijo la esposa. Wallace ayudó a organizar un grupo en Texas llamado San Angelo Freedom Defenders, un grupo que se opuso a las restricciones de COVID-19.
Jessica Wallace le dijo al medio extranjero Standard-Times que su esposo comenzó a experimentar síntomas de COVID-19 el 26 de julio y que al principio, se negó a hacerse la prueba de COVID-19 o ir al hospital, dijo.
Se medicaba con ivermectina, un medicamento que se usa a menudo para tratar parásitos en personas y animales, y que la Administración de Alimentos y Medicamentos de EE. UU. ha dicho que no debe usarse para tratar COVID-19, junto con zinc, aspirina, vitamina C y un inhalador , informó el diario.
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“No quería ver a un médico, porque no quería ser parte de las estadísticas con las pruebas de COVID”, contó la esposa de Wallace.
“Todos tienen derecho a sentirse como se sienten cuando Caleb una vez luchó por sus creencias. Era un hombre imperfecto, pero amaba a su familia ya sus niñas más que a nada”, agregó la mujer.