Brasil registró 975 muertes por coronavirus (COVID-19) en las últimas 24 horas con lo que el promedio de fallecidos de la última semana se ubicó este miércoles por debajo de las 900 víctimas, la cifra más baja desde el 8 de enero y que evidencia los avances del país en la lucha contra la pandemia.
Según los datos divulgados hoy por el Consejo Nacional de Secretarías de Salud (Conass) de los 27 estados del país, el gigante suramericano acumula 565.748 víctimas fatales, con una media de muertes en los últimos siete días de 877 diarias.
En cuanto a los contagios, Brasil ya acumula 20.245.085 positivos, desde que la pandemia llegó al país en febrero del año pasado, tras la notificación de 32.443 nuevos casos en la última jornada.
Las cifras, sin embargo, pueden ser mayores ya que dos estados (Goiás y Roraima) registraron problemas técnicos en sus bases de datos y no se pudo acceder a la información, según explicó el foro que agrupa a las 27 secretarías regionales de salud.
Brasil, uno de los países más azotados por el COVID-19, comienza a ver resultados en la lucha contra el virus, gracias a los avances en la campaña de vacunación, informó este miércoles el Gobierno.
El promedio de muertes se mantienen por debajo de las mil víctimas diarias desde hace dos semanas, una cifra bastante menor al máximo registrado el 12 de abril (3.124).
La media de contagios también sigue cayendo y desde comienzos de agosto está por debajo de los 35.000 casos diarios, casi la mitad del récord registrado el 24 de junio pasado (77.328).
Las cifras también se reflejan en los hospitales del país.
Según el informe de COVID-19 que semanalmente realiza la Fundación Oswaldo Cruz (Fiocruz), el mayor centro de investigación médica de América Latina, la tasa de ocupación de las Unidades de Cuidados Intensivos (UCI) está por debajo del 80% en los 27 estados brasileños por primera vez desde octubre del año pasado.
Las cifras son más alentadoras cuando se observa que solo cinco de los 27 estados registran las tasas de ocupación entre el 60% y el 80%, de acuerdo con el informe divulgado hoy.
No obstante, dos capitales regionales están en situación crítica: Goiás, con una ocupación del 95% de las UCI y Río de Janeiro, con el 97%.
La situación en Río preocupa pues los datos oficiales la señalan como el epicentro de la variante delta en el país, con más de un centenar de casos confirmados con la cepa detectada en la India.
En todo el estado de Río han sido notificados 206 positivos de la delta, casi la mitad de los 570 registrados en todo el país.
Ese linaje del virus es el más contagioso hasta el momento, según los expertos, que recomiendan acelerar las inmunizaciones para evitar casos graves de la enfermedad, un proceso que está suspendido en la “cidade maravilhosa” por la falta de dosis.
Con sus 212 millones de habitantes, el gigante suramericano ha aplicado la primera dosis a más del 51 % de su población, mientras que el 22% ya cuenta con el ciclo completo.
Fuente: EFE