Los escándalos alrededor de las campañas de vacunación en la región no paran. A los funcionarios inmunizados antes de tiempo, pérdidas de dosis y renuncias, se le suman las “vacunas de aire” a hombres y mujeres de la tercera edad en Brasil.
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Este escándalo gira en torno a grabaciones hechas por familiares de las personas de la tercera edad. En ella se observaban ciertos aspectos que los hicieron dudar de la correcta realización de la campaña de vacunación.
En algunos casos la jeringa estaba vacía. En otros, la enfermera no empujaba el émbolo. Esto quedó registrado y fue parte de un reportaje de la cadena Telemundo.
Las enfermeras que se han visto involucradas en estas denuncias han sido separadas de los centros de salud. Aunque una de ellas negó que haya tenido intención. No obstante, la suspendieron en tanto duren las investigaciones.
“Si las investigaciones confirman que hubo desvío de dosis, o cualquier otra irregularidad, el profesional de salud podrá ser acusado por el crimen de peculado (malversación de fondos), que tiene penas que pueden llegar hasta a 12 años de prisión”, informó la Policía Civil de Rio de Janeiro a través de un comunicado.
Sin embargo, una enfermera de Niteroi, en Rio de Janeiro, no tuvo la misma suerte. La Policía la acusó de manera directa debido a la inoculación de aire a una mujer de 90 años “de forma consciente”.
“El análisis del video deja claro que estaba consciente de que no estaba aplicando la vacuna, hasta porque fue alertada y cuestionada por la familia y respondió de forma irónica”, señaló a la estatal Agencia Brasil el comisario Luiz Henrique Pereira.
Autoridades han pedido no generalizar las denuncias, debido a que se trata de hechos aislados. Por el momento, el proceso de vacunación continúa su curso. Brasil es uno de los países más golpeados por la pandemia y se mantiene alerta ante la aparición de nuevas variantes del virus.