El presidente del Instituto Geofísico del Perú (IGP), Hernando Tavera, advirtió que la población peruana no está reduciendo su nivel de riesgo frente a los eventos sísmicos, pese a vivir en un país altamente sísmico.
En declaraciones a RPP, el especialista alertó sobre la reacción ciudadana tras los tres sismos de magnitudes 5,1; 3,8 y 3,9 registrados el último domingo en la zona costera de Chimbote, apenas un día después del sismo de magnitud 6 que dejó más de 20 heridos en la región Áncash.
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“La población reacciona como si fuera la primera vez”
Tavera señaló que una de las principales preocupaciones del IGP es la falta de aprendizaje colectivo frente a estos eventos.
“Desde el IGP estamos viendo que cada evento sísmico importante que ocurre en el país la población siempre reacciona como si fuera la primera vez que ocurre. En realidad, no estamos aprendiendo de esas experiencias”, declaró.
El funcionario remarcó que estas experiencias deberían servir para corregir conductas en el tiempo y trabajar de manera constante en la reducción del riesgo.
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Perú, un país altamente sísmico
Tavera reiteró que los sismos forman parte de la dinámica natural del país y que “lo más extraño es que no se produzcan sismos”, debido a la geodinámica activa en la que se encuentra el territorio peruano.
En ese sentido, precisó que la ciencia no puede evitar que ocurran movimientos telúricos, pero sí es posible reducir sus impactos mediante prevención y preparación.
“Cada persona tiene la responsabilidad de trabajar en reducir su nivel de riesgo. Hemos visto viviendas con daños menores, pero si hubiera sido un sismo de mayor magnitud, los daños estructurales habrían sido mayores y eso generaba mortandad”, sostuvo.
Daños reportados tras los movimientos telúricos
Los recientes sismos en Áncash dejaron daños en viviendas, infraestructura educativa y de salud, además de carreteras y centros comerciales, según reportes preliminares de las autoridades.
El IGP insistió en la necesidad de reforzar la cultura de prevención, el respeto a las normas de construcción y la preparación familiar ante emergencias sísmicas.





