Un hombre de 64 años fue asesinado sin piedad en la localidad de Jequetepeque, en la provincia de Pacasmayo; mientras que en la sierra de La Libertad, tras ocho días de intensa búsqueda, Francisco Ballena Otiniano fue hallado sin vida en Río Seco, en la provincia de Sánchez Carrión. Definitivamente, en la costa y sierra de La Libertad la ola criminal sigue golpeando cada día con más fuerza.
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Sicariato
El último miércoles, minutos antes de las 7:30 de la mañana, Américo Tirado Sánchez caminaba solo en inmediaciones de su chacra, en el distrito de Jequetepeque. Todo marchaba bien, al parecer tenía una reunión pendiente, y estaba esperando a alguien. Sin embargo, fue sorprendido por dos hombres, quienes se movilizaban a bordo de una motocicleta. Tirado Sánchez supuso que se trataba de un robo al paso, pero no fue así.
Uno de los criminales descendió de la unidad, le exigió que se arrodillara y de inmediato le disparó en la cabeza. El agricultor perdió la vida al instante. Al lugar llegaron agentes del Departamento de Investigación Criminal (Depincri) de Pacasmayo y el representante de la Fiscalía. Según las primeras diligencias, habría sido asesinado por un ajuste de cuentas.
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Muerte
Respecto al caso de Francisco Otiniano, este era natural del caserío El Espino, ubicado en el distrito de Chugay, y hace ocho días había desaparecido misteriosamente. Según sus familiares, solo vivía con uno de sus hermanos. El último martes, sin embargo, fue encontrado sin vida. Tenía varios cortes en el cuello.
“Nosotros lo hemos encontrado sin polo, partes del cráneo destrozado y golpes a la altura del omóplato”, declaró un agente de Seguridad Ciudadana de la Municipalidad de Sánchez Carrión.
La familia sospecha que el hermano de Francisco, Juan Otiniano, estaría implicado en este fatal desenlace. Exigieron que lo investiguen.
