En el 2019, el número de feminicidios en el Perú se elevó a 168, superando así los registrados en el 2018, en los que estos llegaron a cobrar la vida de 149 mujeres. El escenario parece no haber cambiado este año. En lo que va del 2020 ya se han conocido tres casos. Dos psicólogos desmenuzan las características psicológicas de uno de los lamentables protagonistas de este lastre en el país: el victimario.

Correo conversó con Omar Zegarra y Martín Zurita, ambos psicólogos de profesión, para que en base a su conocimiento científico iluminen el camino para descubrir qué rasgos diferencian a los feminicidas del resto de la sociedad.

Ya pasaron algunas semanas del feminicidio en El Agustino que horrorizó a la sociedad. (Foto: Marco Ramón).
Ya pasaron algunas semanas del feminicidio en El Agustino que horrorizó a la sociedad. (Foto: Marco Ramón).

LAS CARACTERÍSTICAS QUE PRESENTAN LOS FEMINICIDAS

La mente humana es un misterio constante. Quizá nunca sea posible descifrarla por completo. Sin embargo, existe un patrón de conducta en determinados grupos de personas que pueden dar luz a su naturaleza.

Ingresando directamente al tema, Martín Zurita les atribuye una personalidad antisocial: “Sufren de sociopatía. Al comienzo pueden caer muy bien, incluso puedes creer lo que dicen porque lo hacen con seguridad”.

Sin embargo, como dicen, el diablo está en los detalles. Los feminicidas no muestran su verdadera imagen, ya que son “egoístas y se creen superiores a los demás”. Además, Zurita asegura que sufren de un transtorno bipolar.

En la misma línea se pronunció Omar Zegarra al afirmar que estas personas poseen comportamientos que van más allá de los estándares: “El egoísmo es normal en un ser humano, pero en el caso de un feminicida esta y otras conductas son exacerbadas”.

Presunto autor de feminicidio en Puno Foto: Carlos Fernández)
Presunto autor de feminicidio en Puno Foto: Carlos Fernández)

LA COSIFICACIÓN DE LA MUJER POR PARTE DEL FEMINICIDA

“Para cometer una agresión es porque no te observas en el otro. Ves cosas. Ves seres que pueden satisfacerte”, asegura Zegarra. Y es que el feminicida tiene el concepto equivocado de que la mujer sirve para sus propios intereses, lo que en psicología llaman “la cosificación de la mujer”.

Zurita considera que el victimario está convencido de que la pareja le pertenece, por lo que hace lo que se le da la gana con ella: “si no me sirves, te desecho, es es su pensamiento", indicó.

RELACIÓN ENTRE POBREZA Y FEMINICIDIOS

Un estudio de la Universidad de Lima en conjunto con el Consorcio de Investigación Económica y Social indicó que la mayor cantidad de feminicidios se relacionan con el estilo de vida socioeconómico de los victimarios. ¿Son temas aparte o es que en realidad existe un vínculo entre ambos conceptos?

Según Zurita, se trataría más de una pobreza mental que de una económica. En todo caso, aseveró que una mixtura de factores entran a tallar en el feminicida y sus acciones.

Por el contrario, Zegarra confirma la tesis de la citada investigación: “La carencia económica también está asociada a la pobreza mental y emocional. No necesariamente, pero sí representa un sector en riesgo”, sentenció.

CONSECUENCIA EN LAS VÍCTIMAS DE AGRESIÓN

Sobre las consecuencias en las víctimas, ambos psicólogos concordaron en que la depresión, la ansiedad y el estrés postraumático se manifiestan en las mujeres agredidas por parte de su pareja.

“Incluso los hijos, de darse el caso, también se ven afectados y repetir el círculo vicioso”, señaló Zegarra. En ese sentido, exhortó a que el Estado invierta en la salud mental de los peruanos: “Un psicólogo por colegio no se da abasto”.

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