Para muchas mujeres, la violencia en Arequipa sigue presente en el hogar y en las calles por las constantes denuncias de violaciones, violencia familiar y hasta 8 casos de feminicidios en lo que va del año, según un reporte de la Policía.
Todo esto se vive en tiempos de pandemia, donde muchas de las víctimas vivieron una pesadilla con sus agresores.
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Suceso en Camaná
A tan solo 11 días de iniciar el año, una adolescente de 16 años se convirtió en la primera víctima de violencia a manos de Dariens Barriga Gutiérrez. Su cuerpo apareció envuelto en una frazada y dentro de una poza de agua en Camaná. Al igual que ella, hay otros 7 casos que enlutan a varias familias arequipeñas y deja en la orfandad a varios niños.
Es el caso de Adela Ortíz Vásquez, quien murió baleada presuntamente por Enrique Pumarino Medina en Chala (Caravelí). Tenía 4 hijos con su agresor.
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Los niños también sufren
Pero la violencia no solo termina con la vida de las mujeres, sino de niños y bebés.
Por ejemplo, Karina Ventura Medina tenía 6 meses de embarazo y fue atacada supuestamente por su pareja, Jean Lucas Jhonansoson, el 30 de enero en Camaná.
También Gabriela Mendoza Yanarico y sus dos hijas asesinadas por Edgar Pinto Gómez. Sus cuerpos se hallaron en una vía que conduce al Santuario de la Virgen de Chapi.
La vocera oficial del colectivo Ni Una Menos, Shirley Oporto, indicó ayer que el número de menores asesinadas va en incremento. “Se ha dejado de lado este tema de la violencia y se sigue normalizando (las agresiones). Debemos trabajar como sociedad (...) como podemos lograr el cambio si tenemos autoridades cuestionadas por violación, por agresión, que tienen conductas discriminatorias”, dijo la activista.
Oporto también lamentó que, a raíz de la crisis sanitaria, la atención se centre en salud -el manejo de la pandemia - desatendiéndose estos temas. Además, cuestionó la postura de las autoridades por realizar activismo y no crear políticas públicas para frenar la violencia.
“Hacer activismo no está dentro de sus funciones, deben tener políticas públicas que de verdad ayude a las mujeres, a las niñas...”, protestó la vocera de Ni Una Menos.
A esto se suma que hay más de 11 casos de tentativa de feminicidio, según el Centro de Prevención de Abuso Sexual.
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Se agudizó la violencia
El jefe de la oficina de la Defensoría del Pueblo, Ángel María Manrique Linares, aseguró que el contexto de pandemia ha agudizado la violencia.
“Las medidas de cuarentena, el encierro, han afectado la salud mental de las personas, la crisis económica ha generado mayor conflicto dentro de las familias (...) y esto motivó un incremento en los actos de violencia física, psicológica y sexual” explicó Manrique Linares.
Además de los feminicidios y tentativas, lo que preocupa es que hay 140 casos de menores de edad víctimas de violencia sexual que han quedado embarazadas, según el observatorio de la Defensoría del Pueblo. “El problema es mucho más grave en este contexto de pandemia”, lamentó.
Aunque existen trabajos para poder contribuir en esta lucha, la labor de las autoridades sigue siendo el punto de quiebre.
“Lamentablemente, no existe participación de las autoridades, cada municipio debe tener instancias de prevención en donde congrega a todos los actores sociales, pero no hay un plan de trabajo articulado. Hay ordenanzas, pero no hay un plan para tener estrategias preventivas para evitar la violencia”, cuestionó Manrique Linares.
Hoy se celebra el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer y debe llevarnos a reflexionar sobre el ámbito actual y no solo para otorgar reconocimientos.
Desde la Comisión de la Mujer del Consejo Regional de Arequipa se vienen trabajando ordenanzas y políticas públicas.
Hace unas semanas se congregó a diferentes actores de la ciudad para formular estrategias que ayuden a la lucha.